El ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, defendió ayer que es "perfectamente factible y compatible" acometer la reducción del IRPF que anunció el lunes el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, con el cumplimiento de los objetivos de déficit público pactados con Bruselas, siempre que se mantenga el ritmo de crecimiento de la economía española. "La reducción de impuestos que plantea (el PP) es perfectamente factible y compatible. El truco es mantener el crecimiento de la economía. No tenga la más mínima duda de que será posible compatibilizar el objetivo de déficit con la bajada de impuestos", dijo De Guindos.

Según el ministro, si se mira el programa de estabilidad que el Gobierno envió a Bruselas en abril, ya se observa que el déficit público se situará por debajo del 3% en 2017 y en 2019 ya se situará en el 1,5% del PIB y sin tomar medidas adicionales, simplemente por el ciclo económico y por el crecimiento del PIB que se espera para esos años. "Es perfectamente ajustable y coordinable el objetivo de reducción del déficit con esa rebaja del IRPF", añadió. Cuando no era posible, añadió el ministro, era con un déficit por encima del 9% del PIB como había en 2011, lo que obligó al Gobierno a subir los impuestos.

El déficit del Estado en términos de contabilidad nacional sin embargo creció un 15,7% hasta abril, hasta alcanzar los 13.981 millones de euros, equivalentes al 1,25% del PIB, frente al 1,12% del mismo periodo del año anterior, según los datos publicados ayer por el Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. El déficit del Estado es consecuencia de una caída de los ingresos del 6,23%, hasta 52.483 millones, debido al descenso del 54,5% de los pagos a cuenta del impuesto sobre Sociedades por la incidencia de la reforma fiscal y porque han dejado de estar en vigor medidas transitorias de ejercicios anteriores por las cuales los pagos a cuenta eran mayores.

La Comisión Europea planteó a España la necesidad de reducir su déficit del 5% del PIB al 3,7% en 2016 y el 2,5% en 2017, con la idea de que, una vez el saldo negativo de las cuentas públicas se sitúe por debajo del 3%, pueda salir del procedimiento del déficit excesivo.

Fuentes comunitarias explicaron ayer que no rebajar el déficit público al 2,5% del PIB "no sería la mejor señal", aunque una desviación de décimas al alza, sin sobrepasar el 3%, sería considerado por Bruselas. En cualquier caso, la Comisión Europea insiste en que el déficit público se sitúe en el 2,5% en 2017 y ha pedido a España un esfuerzo estructural del 0,75% para cumplir esta senda. España sin embargo también está inmersa en otro proceso, el de vigilancia de los desequilibrios macroeconómicos por su elevada deuda pública, que supera el 100% del Producto Interior Bruto (PIB). Según las mismas fuentes comunitarias, el Estado tardará mucho tiempo en salir de este proceso. El objetivo es que reduzca su deuda pública al 60% en 2020 y Bruselas sabe que es complicado.

Los secretarios generales de CCOO y UGT, Ignacio Fernández Toxo y Pepe Álvarez, calificaron de "temerario" e "irresponsable" el planteamiento electoral de volver a bajar el IRPF realizado por el PP, que representa la "derecha indocumentada" y tiene "serias dificultades" para poder gobernar desde una perspectiva "realista". Las centrales recuerdan que el país tiene un problema de ingresos y llaman a una participación masiva en las próximas elecciones.