En la larga tradición de Galicia con el negocio eólico, comunidad pionera en el sector, el parque de cabo Vilán, ubicado en el concello de Camariñas, fue el primero en echar a andar. A principios de los años 90. Mucho cambió la actividad desde entonces, también la tecnología, que permitirá ahora a su dueña, Gas Natural Fenosa, incrementar su potencia, modificar su aspecto pero también reducir su impacto ambiental y paisajístico. Las obras de repotenciación comenzaron ayer y con ellas se prevé sustituir los 22 aerogeneradores con los que cuenta ahora por tan solo 2 de una potencia cada uno de 3 megavatios (MW).

La inversión, según detalla la compañía, asciende a 7,6 millones de euros. La colocación de los dos molinos para relevar a los antiguos permitirá a complejo sumar una potencia máxima evacuable de 5,46 MW, un 40% más que la actual. El parque rebajará además el recibo del canon eólico, que la Xunta cobra en función del número de aerogeneradores.

El proyecto instalará dos nuevos aerogeneradores Vestas V-90, de 3 MW de potencia unitaria, con una altura de 80 metros y un diámetro de rotor de 90 metros.

Gas Natural Fenosa tiene una potencia eólica instalada de 290 MW en Galicia, con once parques distribuidos en las cuatro provincias. Tras la construcción en 2014 del parque de Cordal de Montouto, entre Aranga (A Coruña) y Guitiriz (Lugo), la obra de Camariñas está dentro del plan de inversiones que, en 2017, habrá alcanzado los 860 millones de euros, que podrían alcanzar los 1.100.