La sentencia que el pasado jueves hizo pública la Sección Quinta de la Audiencia Provincial coruñesa y que privó a Jove y otros cuatro empresarios de recuperar sus 8,5 millones presenta argumentos muy similares a los que esa misma sección de la Audiencia dio en el fallo que perjudicó a Hijos de Rivera y otras seis empresas, que peleaban por otros veinte millones. El parecido no se da sin embargo sólo en los fallos firmados por el mismo tribunal, sino que llega a compartir frases textuales con el que dictó la Sección Tercera contra Gadisa, el más duro de los tres conocidos hasta ahora.

Y es que las sentencias unifican el criterio de la jurisdicción provincial y asumen todos y cada uno de los argumentos expuestos por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) en el juicio y los fundamentos de su recurso; que no engañó a los inversores. Tanto el fallo de Gadisa como el de Jove subraya que Novagalicia era "un banco totalmente sobredimensionado ya antes de la fusión de las cajas".

Las tres sentencias critican que las empresas no se hubieran asesorado para conocer el verdadero estado del balance de NCG, cuestionan que empresarios de "reconocido prestigio" se fiasen de la información que ofrecían los vendedores y en el caso de Gadisa duda incluso de que así fuera: "Parece difícil sostener que un avezado y experto empresario se dejó convencer por unas notas de prensa que recogen las explicaciones del señor Castellano sobre algo que sorprendió desagradablemente a la opinión pública gallega; las cajas sólo valían 181 millones".