La riqueza financiera neta de las familias españolas se situó en 1.199.796 millones de euros en el primer trimestre de este año, lo que supone un descenso del 3,9% respecto al mismo periodo de 2015, fundamentalmente por la caída de las cotizaciones bursátiles, según datos del Banco de España, de lo que se extrae que los activos financieros netos equivalen al 110,1% del PIB, unos nueve puntos porcentuales menos que al cierre de marzo de 2015.

Con todo, la riqueza de los hogares se mantiene por encima de los niveles previos a la crisis económica, ya que en el primer semestre de 2007, justo antes del comienzo de la recesión económica, rozaba el billón de euros. Esto pone de manifiesto que las familias han aprovechado los años de la crisis para reducir su deuda y elevar su riqueza.

De hecho, la deuda de los hogares se situó al finalizar el primer trimestre en 774.046 millones de euros, su nivel más bajo desde marzo de 2006 y cifra un 3,3% inferior a la de un año antes.