El Tesoro Público colocó ayer 3.077 millones de euros en la emisión de bonos y obligaciones, la última del mes, en el rango medio de los objetivos de la subasta. Sin embargo, lo más significativo es que logró por primera vez en su historia bonos a tres años con interés negativo. De esta forma, el organismo, que ya venía cobrando desde el pasado año por la emisión de letras, da el salto también a los bonos con vencimiento a medio plazo, pese a que España sigue arrastrando una parálisis política y a que la UE decidirá en una semana si impone una sanción por el incumplimiento del objetivo de déficit en 2015.

El Tesoro colocó 1.715 millones en bonos a tres años, con una demanda de 1,7 veces dicha cantidad. El tipo de interés marginal se situó en el -0,061%, frente al 0,154% de la subasta anterior. En los bonos a cinco años, adjudicó 907 millones a un tipo marginal del 0,238%, frente al 0,599% previo.