BBVA obtuvo un beneficio atribuido de 1.832 millones de euros en los seis primeros meses del año, lo que supone un 33,6% menos que en el mismo periodo de 2015, debido al impacto en sus cuentas de los tipos de cambio y a la ausencia de operaciones corporativas, según informó ayer el banco, que precisó que, sin estos dos efectos, su resultado aumentan un 5,8%.

Mientras, la tasa de mora de BBVA se redujo por cuarto trimestre consecutivo y cerró junio en el 5,1%, dos décimas menos que en marzo y su menor nivel desde diciembre de 2012. La ratio de cobertura se mantuvo en el 74%. El crédito bruto concedido aumentó un 10,2% en el último año, hasta 433.268 millones, y los depósitos de clientes sumaron 406.284 millones (+11,7%).

El consejero delegado de BBVA, Carlos Torres, descartó un ERE adicional en España más allá del ajuste de plantilla ejecutado con motivo de la integración de CatalunyaBanc (CX), si bien anticipó "medidas adicionales" en todos los países en los que opera el grupo para controlar costes y ganar eficiencia.