La morosidad de los créditos concedidos por los bancos, cajas y cooperativas a particulares y empresas bajó al 9,39% en julio, con lo que se sitúa en mínimos desde junio de 2012, cuando alcanzó el 9,42%, según los datos provisionales publicados ayer por el Banco de España. Esta cifra incluye el cambio metodológico en la clasificación de los Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), que desde enero de 2014 dejaron de ser considerados como entidades de crédito.
La cifra total de créditos dudosos cayó en julio hasta los 120.827 millones de euros, 1.681 millones menos que el mes anterior, con lo que se situó en su menor nivel desde mayo de 2012.
Mientras, el resultado atribuido de los grupos bancarios españoles alcanzó los 5.874 millones de euros en los seis primeros meses del año, lo que supone una reducción del 27,2% respecto al alcanzado en el mismo periodo de 2015, según los datos facilitados por la Asociación Española de Banca (AEB).
La patronal bancaria explicó que este resultado se debe a las pérdidas registradas en la enajenación de activos y a los mayores gastos por impuestos, que cuantificó en un aumento del 51%.
