FerroAtlántica se hizo en 1992 con la división de electrometalurgia, a la que dedicó un importante esfuerzo para relanzar medios productivos, como la planta de Sabón, inicialmente vinculada al grupo Alcoa Inespal, con casi 125.000 metros cuadrados de superficie al pie de la costa arteixana.

La fábrica tiene una capacidad de producción anual de 40.000 toneladas de silicio y 17.000 de microsílice y en ella trabajan 130 personas asociadas a FerroAtlántica SAU y otras 28 en Silicio Termosolar, la matriz del proyecto que la multinacional anunció ayer. Los responsables de esta última firma comunicaron ayer al comité de empresa la decisión de ejecutar la nueva fábrica, pocos minutos antes de comunicárselo a los medios de comunicación. La de Sabón es una de las tres plantas gallegas de FerroAtlántica, además de las de Cee y Dumbría, que suman una capacidad de producción de 79.000 toneladas de ferrosilicio, 55.000 de ferromanganeso y 37.000 toneladas de silicomanganeso. Tiene además las minas de cuarzo de Serrabal, Tordoia, y Trasmonte y siete plantas hidroeléctricas en el Xallas y el río Grande, entre otros activos en España.

Fusión

FerroAtlántica forma parte de la multinacional Ferroglobe desde diciembre. El grupo cuenta con 26 fábricas y diez explotaciones mineras en los que suma 4.500 trabajadores y un beneficio de explotación estimado de 285 millones de euros. El grupo Villar Mir tiene la mayoría de las acciones.