Abengoa registró unas pérdidas de 3.689 millones de euros en el primer semestre del año, frente a los 72 millones de euros de ganancias en el mismo periodo del ejercicio anterior, debido al reconocimiento de pérdidas derivadas del deterioro de determinados activos y a la ralentización generalizada del negocio, según informó ayer la compañía andaluza.

El grupo se encuentra en preconcurso de acreedores desde noviembre del año pasado y actualmente está inmerso en el proceso de obtención de adhesiones al acuerdo de reestructuración de su deuda, que alcanzó el pasado 24 de septiembre con determinados inversores y acreedores financieros.

De los principales impactos a cierre de junio, que ascienden a 3.253 millones de euros, el importe correspondiente al deterioro de activos y sociedades asciende a 3.079 millones de euros, relacionado fundamentalmente con pérdidas contables por la menor valoración de los activos de bioenergía en Estados Unidos y Europa y de líneas de transmisión en Brasil.