La multinacional textil coruñesa Inditex se encuentra en pleno desarrollo de su Plan Estratégico Medioambiental 2016-2020, "que profundiza en el modelo de economía circular responsable en todas las fases productivas". Uno de sus objetivos es que la totalidad de las tiendas del grupo fundado por Amancio Ortega sean ecoeficientes dentro de cuatro años, lo que equivale a que reducirán el consumo de energía alrededor de un 30% y un 50% el de agua en relación con un establecimiento convencional. Además, entre las características de los puntos de venta ecoeficientes está el reciclaje de materiales y la certificación de elementos sostenibles en tienda.

Este reto es un paso más del gigante de Arteixo en su compromiso social y sus buenas prácticas para la protección del medio ambiente, pero al mismo tiempo contribuye a una mayor eficiencia económica porque la renovación tecnológica -como es el caso de la sustitución de los sistemas de iluminación de las tiendas por otros más eficientes- proporciona un importante ahorro. De hecho, la factura de la luz de las tiendas de Inditex supone alrededor del 15% del gasto total de los establecimientos, según explicó el personal de la compañía en la reciente inauguración de la sede de Pull&Bear en Narón coincidiendo con su 25 aniversario.

El desembolso en energía es cuantioso y, por ello, la renovación de la iluminación de las tiendas es uno de los puntos del Plan Estratégico Medioambiental que van más adelantados. La compañía que preside Pablo Isla calcula que habrá finalizado el cambio de los sistemas de iluminación en los establecimientos de todas las cadenas del grupo en 2018, un proceso que en el caso de Pull&Bear estará completado a finales del año que viene, según explicaron los representantes de la enseña con sede en Narón.

Entre los objetivos de Inditex para que el 100% de sus tiendas sean ecoeficientes de aquí a 2020 está también que el 80% de la electricidad consumida proceda de fuentes de energía renovable con certificados de garantía de origen, una reducción de las emisiones de dióxido de carbono del 55% y eliminar el envío de residuos a vertederos, con el reciclaje de todos los materiales desechados en los establecimientos.

La sede ecoeficiente de la cadena Pull&Bear de Narón -presentada a los medios en septiembre en el marco de la celebración del cuarto de siglo de vida de la enseña de moda joven del grupo fundado por Amancio Ortega- es precisamente un referente del Plan Estratégico Medioambiental por su "eficiencia energética, reducción de emisiones y minimización de residuos", en línea con otras actuaciones realizadas en los últimos años como las nuevas instalaciones de Inditex en el polígono de Sabón, la ampliación del centro logístico de Pull&Bear en Cabanillas (Guadalajara), la sede de Massimo Dutti en Tordera (Barcelona) o el centro tecnológico de Inditex en Arteixo.

El edificio de la sede central de Pull&Bear opta, por su diseño ecoeficiente, a la certificación medioambiental LEED (Leadership in Energy and Environmental Design) en su categoría Oro. Este distintivo identifica aquellos inmuebles "diseñados y construidos a partir de parámetros encaminados a conseguir el máximo nivel de ecoeficiencia", para lo que analiza aspectos como el ahorro de energía, de agua, la reducción de emisiones de dióxido de carbono, la mejora de la calidad ambiental interior, una adecuada administración de los recursos y la sensibilización con el impacto ambiental.

Entre las mejoras que ofrece la sede de Narón respecto a un edificio convencional están el gasto de un 20% menos de energía, un ahorro del 50% en el consumo de agua y evita la emisión de más de 230 toneladas de dióxido de carbono por ejercicio.

A estas características se suma la integración en el medio ambiente pues las instalaciones se completan con alrededor de 30.000 metros cuadrados en el entorno del inmueble que reproducen un bosque autóctono gallego y que están pensados como zona de "descanso y esparcimiento" para los trabajadores. De hecho, para la recreación de ese bosque, Inditex realizó una selección de plantas autóctonas presentes en la zona para dar continuidad a los hábitats existentes en las proximidades de la sede. Entre ellas hay castaños, robles, fresnos y hayas y todo el espacio se puede recorrer a través de un sendero de 600 metros de longitud apto para que los trabajadores puedan realizar distintas actividades deportivas.