El portavoz del comité de empresa de Ferroatlántica, Alfonso Mouzo, advirtió ayer a la Xunta de que debe cumplir la ley e impedir la segregación de las dos fábricas y las seis centrales que la empresa tiene en A Costa da Morte para su venta pues supondría "la ruina" para esta zona de A Coruña. Tras reunirse con los representantes de los grupos de la oposición en el Parlamento gallego (En Marea, PSdeG y BNG), los trabajadores de la filial del grupo OHL advirtieron de que la venta de las centrales por separado, "como pretende el señor Villar Mir para tapar los agujeros que tiene la constructora OHL", supondrá también el cierre de las fábricas de ferroaleaciones.

"La Xunta debe cumplir la ley, que no permite segregar ni separar las centrales hidroeléctricas de las concesiones", aseveró Mouzo, que recordó que dos sentencias del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y del Tribunal Supremo dejan claro que no se pueden segregar "porque se trata de una unidad productiva única". El portavoz de la plantilla explicó que también se reunió con el conselleiro de Industria en funciones, Francisco Conde, pero que no aclaró si permitirá la segregación de activos. "Nos dijo que iba a cumplir con la ley y la salvaguarda del interés público, pero no dijo nada de la segregación de las concesiones", lamentó Mouzo.

La plantilla está en plena campaña informativa sobre el daño que causaría la venta de las centrales de Ferroatlántica. El domingo repartió panfletos en el mercado municipal de Cee y ayer denunció que una agencia contratada por la empresa "chantajea" a asociaciones culturales y deportivas para que no protesten por la posible venta. "Compra voluntades", concluyó Mouzo.