La compañía de seguridad privada Segur Ibérica, propiedad del grupo Segur, convocó ayer a los comités de empresa de la firma a una mesa de negociación "para analizar" la situación económica en la que se encuentra, que podría acabar en la presentación de un expediente de regulación de empleo (ERE). La compañía -que cuenta con 4.000 trabajadores en toda España, unos 700 en Galicia- desmintió a fuentes sindicales que apuntaban a que la firma pretendía despedir a toda la plantilla y matizó que aún no se han concretado los detalles del expediente. "No es un ERE extintivo ni de cierre, sino un procedimiento de adecuación de la estructura del negocio actual de la empresa", aclaró la filial del grupo Segur.

Esta firma de seguridad privada cuenta con alrededor de 700 trabajadores en Galicia, pero la mayoría están adscritos a contratos con otras compañías, lo que limitaría el impacto de un posible ERE. "Prestan servicio a otras firmas y si Segur Ibérica deja de darlo, la compañía que entre tendría que subrogar a los trabajadores, porque el servicio no puede dejar de prestarse y los empleados tienen ese derecho por convenio", explicó un representante sindical gallego, que limitó el impacto, en caso de aplicarse el ERE, al personal de oficina, de estructura de la empresa, "sobre unos 30" empleados. Este sindicalista aseguró no entender los motivos de la empresa para "generar este revuelo".