El gigante del transporte con sede en la localidad luguesa de Sarria, nació en los años 30 a partir de una pequeña flota de autocares que puso en marcha el padre de Raúl López. Cuenta con más de 2.000 vehículos, supera los 1.000 empleados y en 2014 alcanzó un beneficio de 5,516 millones de euros.

La larga lista de filiales que lo integran incluye la explotación de varias concesiones públicas de transporte de viajeros por carretera, urbanos, venta de combustible, agencia de viajes y el alquiler de coches. Entre las firmas que la integran destacan por facturación Empresa Monforte, con más de 31 millones de euros de cifra de negocio, según los datos que figuran en el Registro Mercantil, y un beneficio de 6,2 millones; Transportes La Unión (ganó 2,5 millones; Castromil (2,1 millones); La Hispano Igualadina (1,8 millones ) y Auto Industrial (1,2 millones). Alcalabus, Autobuses Alsina, y Vigo Barcelona perdieron dinero.

La presencia de Abanca en Monbus se debe al apoyo que las cajas brindaron a la empresa para su expansión nacional e internacional (explota viajes a destinos europeos con Eurolines y Transporte Urbano), pero la entidad sigue siendo acreedora, con lo que en caso de cerrarse la venta, obtendría ingresos extras.

Todas las auditoras encargadas de revisar las cuentas de las filiales que forman Monbus recuerdan la operación Cóndor abierta a su máximo accionista y al negocio del grupo para introducir "salvedades" en su análisis por el desconocido efecto que tendrán sobre sus cuentas.