El consejero delegado de Ferroglobe y presidente de Ferroatlántica, Pedro Larrea, insiste una y otra vez que las fábricas de ferroaleaciones de Cee y Dumbría "no cerrarán en ningún caso", haya o no venta.

El directivo sin embargo no se muestra tan tajante a la hora de garantizar el empleo. "El escenario, que no prevemos, de no llevar a cabo este proyecto es un escenario de estancamiento, deterioro progresivo, no por voluntad de la empresa sino porque la falta de inversión y nuevas tecnologías, harían perder la competitividad", dijo ayer en una entrevista concedida ayer a Radio Galega. En otra, publicada por el diario ABC, Larrea fue más explícito sobre el posible resultado de esa falta de competitividad. "Si eso supone reducción de plantilla, habrá reducción de plantilla", dijo.

El directivo explicó que la empresa no ha presentado su solicitud a la Xunta - ni mantiene ningún contacto con la Administración gallega- porque quiere "elaborarla" y buscar el mayor consenso posible, pero no aclara si formalizará la autorización si no llega a recibir el apoyo de la plantilla de Cee y Dumbría, que mantiene su huelga.