Centenares de representantes sindicales de UGT y CCOO y trabajadores secundaron ayer concentraciones ante las sedes de las patronales de A Coruña, Ferrol, Lugo, Ourense y Vigo para exigir a los empresarios que retomen la negociación colectiva y que en ella se incluya la recuperación del poder adquisitivo para que la recuperación económica "llegue a las familias". Una jornada reivindicativa que se extendió por todo el Estado, con concentraciones en la principales ciudades españolas.

Ambos sindicatos denunciaron que, pese al pronóstico de aumento del PIB de Galicia en 2017 del 2,4%, "en muchos aspectos, se siguen agravando los desequilibrios estructurales que persisten" en la economía gallega. "El crecimiento no se traduce en una mejora de la calidad de vida de la población", denunciaron CCOO y UGT en un comunicado conjunto.

El secretario comarcal de UGT en A Coruña, José Carrillo, sostuvo que los trabajadores "no pueden seguir perdiendo poder adquisitivo". "Hay que recuperar una parte de lo perdido", apostilló, por lo que instó a la patronal a aceptar una subida salarial de "entre el 1,8% y el 3%".

El presidente de la patronal española CEOE, Juan Rosell, aseguró, por su parte, que las concentraciones realizadas por CCOO y UGT son "ceremonias" que sirven para "dar espectáculo" y subrayó que, en vez de optar por ese camino, lo mejor sería que los sindicatos respondieran a la propuesta empresarial sobre negociación colectiva. "Yo las considero una ceremonia [las concentraciones] y si quieren hacer ceremonias, que las hagan. Cuando nosotros presentamos papeles y propuestas, que nos contesten a las propuestas en vez de dar espectáculo y hacer ceremonias de este tipo", apuntó Rosell en declaraciones a RNE recogidas por Europa Press.

"No espectáculo, necesidad"

El dirigente patronal recibió una rápida respuesta del secretario general de UGT, Pepe Álvarez, que le espetó que el "espectáculo" no lo dan los sindicatos sino la patronal por no sentarse a negociar. El sindicalista advirtió además de que si los empresarios no empiezan a debatir "se van a encontrar con una respuesta mucho más contundente". "Hay que ser un poco más respetuoso con los trabajadores, no es ningún espectáculo, es una necesidad la que tenemos de mejorar los salarios", concluyó Pepe Álvarez.