El ministro de Economía, Luis de Guindos, afirmó ayer tras la sentencia de las tarjetas opacas de Caja Madrid y Bankia -que condenó a diversas penas de prisión a los 65 procesados (incluido el exministro de Economía Rodrigo Rato) por un delito continuado de apropiación indebida- que el tiempo "siempre acaba poniendo todo en su sitio".

Que Rato, un emblema de la gestión económica del PP, figure entre los condenados, y con la segunda mayor pena de prisión (4 años y seis meses) no afectó al actual ministro: "Ni me duele ni me deja de doler", dijo De Guindos.