El director general de Energía y Minas, Ángel Bernardo Tahoces, evitó ayer aclarar si alguno de los responsables de la Consellería de Economía, Emprego e Industria mantuvo contactos con el fondo canadiense Brookfield, que según fuentes del mercado, alcanzó un acuerdo con Ferroatlántica para comprarle seis centrales hidroeléctricas en la comarca de Fisterra pese a que las concesiones con las que las gestiona impiden la venta sin permiso de la Xunta.

Durante su comparecencia en la Comisión 6ª de Industria, Energía, Comercio y Turismo del Parlamento de Galicia Tahoces se limitó ayer a insistir en que Ferroatlántica "no ha presentado ninguna solicitud de segregación", por lo que descartó "la venta de las centrales hidroeléctricas de los ríos Xallas y Grande. "La Xunta no se puede manifestar sobre algo que no está presentado", dijo, aunque reafirmó "el compromiso de estar del lado de los trabajadores, salvaguardar el interés público y ofrecer la máxima transparencia posible".

Tahoces sin embargo se negó a manifestarse sobre las reuniones con representantes de Brookfield, sobre las que fue interpelado en diversas ocasiones por el diputado de En Marea Pancho Casal Vidal.

Tahoces dejó claro que la "obligación" del Ejecutivo autonómico es reunirse "con todas las partes", aunque luego rebajó la posible venta a una "hipótesis".