La mejor manera de defender a la clase obrera de Galicia es con la suma de fuerzas de las tres principales organizaciones sindicales: Comisiones Obreras, UGT y CIG. Fue el mensaje que dio ayer en Santiago el nuevo secretario xeral de la primera, Ramón Sarmiento, quien defendió una iniciativa de "unidad sindical más allá del eslogan". "La clase obrera y la sociedad gallegas necesitan una respuesta unitaria en materia de negociación colectiva", expuso. El XI Congreso de CCOO Galicia respaldó al pontevedrés con el 82,5% de los votos (de un censo total de 235 delegados), que llegó al cónclave como único candidato tras integrar en su proyecto a Maica Bouza. La cita contó con la asistencia del secretario confederal del sindicato, Ignacio Fernández Toxo, la presidenta del Consello Económico e Social (CES Galicia), Corina Porro, o el conselleiro de Economía, Francisco Conde, entre otros políticos.

Sarmiento agradeció el trabajo de su predecesor, Xosé Manuel Sánchez Aguión, quien recibió el reconocimiento de Toxo (que también dejará el cargo este año) y del conselleiro. El secretario general llamó asimismo en su discurso al Partido Popular a "no gestionar su mayoría absoluta desde la prepotencia" y a la oposición a "no esquivar tanto la colaboración", aunque también tendió su mano al diálogo con todos ellos y prometió a Conde un sindicato "discrepante pero leal". Sarmiento, de 43 años y con un amplio historial en el sindicato (dejó en febrero la dirección de CCOO Industria en Vigo) concluyó remarcando la necesidad de "renovar la organización desde dentro", calificando de "nuestro proyecto" el del que previsiblemente será nuevo secretario general de la central a nivel estatal, Unai Sordo al grito de "¡Viva Comisiones Obreras, Viva Galicia y Hasta la victoria siempre!" En el congreso también se eligió una nueva comisión ejecutiva, formada por cinco mujeres y cuatro hombres, incluido el propio Sarmiento. Son Maica Bouza, Mabel Pérez, Xesús Castro, Carmen Peteiro, Omar Ceveira, Roi Fernández, Yolanda Martínez y Carmen Adela Sabio. Solo los tres primeros figuraban en la ejecutiva de Aguión.