La Comisión Europea criticó ayer a España por la corrupción y la insuficiencia de las medidas adoptadas para prevenirla y combatirla y censuró a su vez al país por la elevada temporalidad laboral y el paro excesivo. El Ejecutivo comunitario exige más ajustes en 2018 para reducir el déficit estructural (la parte del descubierto que no depende del ciclo de la economía) y mantiene a España sometida al protocolo por déficit excesivo tras proponer al Consejo que excluya a Portugal y a Croacia. A Bruselas le preocupa también el crecimiento de la deuda pública española.

Si se ratifica la exclusión de Portugal y Croacia, sólo cuatro de los 28 países de la UE seguirán bajo control: España, con un descubierto del 4,5% en 2016; Francia (-3,4%) y Reino Unido (-3%) -según los datos que divulgó recientemente Eurostat-, además de Grecia que, aunque logró un superávit del 0,7%, arrastra déficits muy altos de ejercicios precedentes y debe demostrar la sostenibilidad del actual equilibrio.

La CE considera que España, pese a los avances en el control de los desajustes fiscales, incumplirá este año el objetivo en una décima y que no está haciendo suficientes esfuerzos para recortar el déficit estructural y exige por ello más acciones en 2018. El ministro español de Economía, Luis de Guindos, dijo que las exigencias son asumibles.

Bruselas reclama a España que adopte medidas para luchar contra la corrupción, ve riesgo de impunidad en los casos más complejos tras haber legislado el Gobierno la reducción de los plazos de instrucción y reclama mayor protección a quienes denuncien corruptelas.

En materia laboral, la Comisión reprocha la alta tasa de temporalidad, el paro elevado (sobre todo, el juvenil y el de los trabajadores no cualificados) y la dualidad en el mercado del trabajo y las distintas indemnizaciones por despidos según tipos de contrato. De hecho, el Ejecutivo comunitario pidió a España más coordinación entre los servicios de empleo, los servicios sociales y las empresas para responder a las necesidades de parados y empresarios y medidas para promover la contratación indefinida.

Además, Bruselas llama la atención a España por los escasos ingresos por IVA, pese a tener una tasa estándar, en línea con la media europea, algo debido a la "extensiva aplicación de exenciones y tasas reducidas sobre varios productos y servicios". La CE plantea en ese contexto una revisión del gasto público para identificar áreas donde mejorar su eficiencia.

Portugal y Croacia

En sus nuevas recomendaciones por países (para un periodo de entre doce y dieciocho meses), Bruselas propone al Consejo de la UE cerrar los procedimientos por déficit excesivo a Croacia y Portugal porque ambos estados miembros situaron el indicador por debajo del 3% del PIB, límite fijado en el Pacto de Estabilidad y Crecimiento.

"Es una noticia muy importante para Portugal, para la economía portuguesa, para el pueblo portugués. Es un bello reconocimiento de los logros conseguidos por los croatas y portugueses para salir de la crisis que ha tenido un impacto social fuerte", afirmó el comisario europeo de Asuntos Económicos y Financieros, Pierre Moscovici.