El pleno de la Diputación de A Coruña aprobó ayer -con el voto favorable de PSdeG, BNG, Marea Atlántica, Compostela Aberta y Alternativa dos Veciños y la abstención del PP- una moción en la que insta a la Xunta a rechazar el plan de Ferroatlántica de segregar sus actividades de producción eléctrica y de ferroaleaciones en Cee y Dumbría con la finalidad de vender las centrales hidráulicas de los ríos Xallas y Grande.

El Ejecutivo gallego está en plena tramitación de la solicitud de la compañía controlada por Villar Mir para separar las dos actividades y deshacerse de los saltos de agua -que ya no considera estratégicos- para obtener fondos y desarrollar su plan industrial.

El texto aprobado por la institución coruñesa, sin embargo, sostiene que la segregación de las centrales de las fábricas "supondría la desaparición del tejido productivo industrial" de A Costa da Morte. De hecho, el presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, recordó que la concesión hidroeléctrica concedida en su día a Carburos Metálicos -ahora propiedad de Ferroatlántica- ya vinculaba el aprovechamiento hidráulico a la producción de ferroaleaciones. González Formoso criticó además la actuación de la compañía y la comparó su gestión "con la de aquellas familias que venden casa tras casa, finca tras finca", todos los activos que tienen, para mantener un alto nivel de vida. "Ferroatlántica tiene que vender lo que vale para poder sobrevivir y cuando dentro de siete años, que es en los que da garantías [de inversión y empleo], volvamos a estar en la misma situación, ¿qué va a hacer?", aseveró el presidente de la Diputación de A Coruña.

El alcalde de Dumbría y portavoz del PSdeG en la defensa de la moción, José Manuel Pequeño, aseguró que esta situación no es nueva y que ya con la crisis de 1992 "amenazaron con que, si no se dejaba vender por separado, cerraban las fábricas". "Estamos otra vez ante el mismo chantaje", denunció Pequeño, que pidió que si en su día "Fraga y Cuíña no lo permitieron [la segregación], tampoco lo debería permitir Feijóo". El alcalde de Dumbría anunció además la posibilidad de convocar a los alcaldes para una huelga en la comarca o una manifestación ante la Xunta para defender la continuidad de las actividades en A Costa da Morte.

El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, reivindicó, por su parte, la "transparencia" del Ejecutivo autonómico en relación con el expediente de Ferroatlántica y se reafirmó en que los técnicos emitirán "su parecer", que es "el que se va a seguir", en cuanto sea posible.

La Xunta entregó ayer a los trabajadores la documentación sobre la petición de la compañía de segregar su actividad, lo que facilitaría la venta de las centrales de A Costa da Morte.