La buena evolución del paro registrado obtenida por Galicia en los últimos meses se ha trasladado a los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), que revela que la comunidad gallega cerró el segundo trimestre del año con 15.600 desempleados menos que en los tres primeros meses del ejercicio. La autonomía contaba a cierre de junio con 201.500 personas sin trabajo, un 7,22% menos que un trimestre antes, cuando los parados gallegos ascendían a 217.100. Este descenso del desempleo es levemente inferior al registrado en el conjunto del Estado, del 8,01%, con 340.700 profesionales sin empleo menos, al pasar de 4.255.000 personas en esta situación en el primer trimestre a 3.914.300 en el segundo. Es la primera vez que España baja de los cuatro millones de parados desde finales de 2008, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE).

La tasa de paro gallega, sin embargo, es un punto inferior a la media nacional al situarse en el 16,11%, frente al 17,22% del conjunto del Estado.

En esta ocasión la reducción del desempleo en Galicia se trasladó casi totalmente al mercado laboral con la creación de puestos de trabajo pues la comunidad sumó 15.300 ocupados en el segundo trimestre del año, 170 al día, con lo que alcanza los 1.048.900 profesionales con trabajo. En España, la ocupación incluso aumentó en mayor proporción que el descenso del paro, con 375.000 personas más con empleo y un total de 18.813.300 millones de trabajadores, la mayor cifra desde finales de 2009.

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Por provincias, la gallega que más empleo creó en el segundo trimestre de 2017 fue A Coruña, con 8.100 ocupados más, más de la mitad del incremento gallego, por delante del alza de 3.200 en Pontevedra, de 3.100 en Lugo y de 800 en Ourense. La reducción del desempleo, sin embargo, estuvo liderada por la provincia ourensana, con 6.000 personas sin trabajo menos que a cierre del primer trimestre, seguida de A Coruña (-4.900), Pontevedra (-2.700) y Lugo (-2.000).

Esta mejoría del mercado laboral gallego favoreció un descenso en el número de hogares en una situación laboral complicada. Al igual que el paro, las familias con todos sus integrantes en el desempleo descendieron un 7%, al pasar de 79.300 a cierre del primer trimestre de año a 68.500 en el segundo. El mayor descenso por provincias vuelve a corresponder a A Coruña, con 1.500 hogares menos en esa situación, un total de 27.200.

En el conjunto del Estado, las familias con todos sus miembros en paro bajaron en 117.100 en el segundo trimestre, un 8,4% respecto al trimestre anterior, hasta situarse en 1.277.600, su cifra más baja desde el cuarto trimestre de 2009.

Los sindicatos insistieron ayer en que las buenas cifras de la EPA esconden la precariedad y temporalidad de la mayoría de empleos creados en los últimos meses, una situación que incluso reconoció el ministro de Economía, Luis de Guindos, que indicó que el Gobierno debe centrar sus esfuerzos en reducir los contratos eventuales.