La mejoría del mercado laboral en Galicia en los últimos años ha permitido que las cifras de paro en la actualidad estén al nivel de los primeros años de la crisis. Tras esa buena evolución de los datos generales se esconde, sin embargo, una situación mucho más difícil para buena parte de esos profesionales que carecen de empleo en la comunidad gallega. La Encuesta de Población Activa (EPA) del segundo trimestre de este año revela que Galicia tiene un total de 201.500 desempleados, prácticamente la misma cifra que a cierre del primer semestre de 2010, cuando la autonomía contabilizaba 201.300 personas sin trabajo. Pero los parados que llevan más de dos años sin encontrar ocupación -conocidos como desempleados de muy larga duración- casi se han triplicado en estos siete años, al pasar de los 32.500 del segundo trimestre de 2010 a los 85.600 de entre abril y junio de este año, lo que supone un repunte del 163%.

De hecho, el alza en este grupo de desempleados provocó que su peso sobre el total haya pasado de ser del 16% a superar el 42%.

La situación es especialmente grave teniendo en cuenta que buena parte de los profesionales que superan los 24 meses en el paro carece ya de cualquier tipo de prestación o subsidio por desempleo, por lo que su situación económica es muy delicada. Además, tras tantos meses sin actividad, estos trabajadores son rechazados por muchas empresas, que prefieren contratar a profesionales más insertados en el mercado laboral.

Las estadísticas de la EPA, actualizadas las semana pasada por el Instituto Galego de Estatística, revelan además que de esos 86.500 gallegos que suman más de dos años sin encontrar un puesto de trabajo más de 77.000 (casi el 90%) tuvieron alguna ocupación anteriormente, pero otros 8.500 están en esa situación cuando tratan de incorporarse por primera vez al mercado laboral, buscan su primer empleo. Siete años antes, en 2010, los parados (habitualmente jóvenes) que llevaban más de dos años sin encontrar la que sería la primera ocupación de su vida laboral eran solo 2.600, por lo que la cifra repuntó desde entonces un 226%, lo que equivale a que se multiplicó por más de tres. Esos 8.500 que buscan su primer empleo sí carecen de todo tipo de prestación al no haber cotizado nada hasta el momento.

Y este escenario de niveles de paro similares a los de 2010 pero con importantes repuntes en los desempleados de muy larga duración se repite en todas las provincias gallegas en mayor o menor medida.

El mayor incremento correspondió a Lugo, donde la cifra total de paro (20.500) supera levemente la de siete años atrás (18.400), pero la de profesionales que llevan más de dos años sin encontrar ocupación se multiplicó por cuatro (+300%), al pasar de 2.000 en 2010 a 8.000 a cierre de junio de este año.

El segundo repunte más importante correspondió a Pontevedra, del 174%, pues pasó de tener 12.500 desempleados de muy larga duración a superar los 34.000, mientras que su cifra total de profesionales sin ocupación sólo bajó en 100, de 82.900 a 82.800 personas.

La tercera posición corresponde a A Coruña, que cerró junio de este año con 34.200 parados que llevan más de dos años sin trabajar, frente a los 13.400 de siete años atrás, lo que supone un aumento del 155%, pese apenas varió el número total de parados, de 76.500 en 2010 a 76.800 a cierre del trimestre pasado.

La mejor evolución, por su parte, correspondió a Ourense que, pese a todo, duplicó su cifra de desempleados de muy larga duración, de 4.600 a 9.200. También tuvo el mejor comportamiento en la cifra total de personas sin trabajo, pues pasó de 23.500 en el segundo trimestre de 2010 a los 21.400 del mismo periodo del presente ejercicio, lo que supone 2.100 menos.