El arranque del nuevo curso escolar -sumado a la vuelta de las vacaciones- no será complaciente con la cartera. Al desembolso habitual para el avituallamiento de armarios y mochilas de los más pequeños se sumará este año un incremento de los principales componentes del gasto de los hogares. A excepción de las hipotecas, gracias a un Euribor que sigue en mínimos, todo será más caro que hace un año. Y aunque los salarios han subido, de momento no compensan el incremento de los precios.

Electricidad. Cotizaba al cierre de la semana pasada a 49,25 euros el megavatio hora (MWh), según los datos de la operadora OMIE consultados por este diario. Es un 18% más que el mismo día del año pasado en el mismo mercado mayorista, cuando el precio medio ascendió a 41,5 euros MWh. También está un 4,2% por encima de los precios marcados de media durante el mes de agosto. La organización de consumidores Facua calcula que cada hogar pagará de media 3,81 euros más que hace un año por su factura de la luz.

Los combustibles. La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) denunció reiteradamente los efectos cohete y pluma. Cuando sube el barril de petróleo, el precio se traslada de inmediato a los surtidores de gasolina y gasóleo; si baja, lo hace de manera remolona. Pero esta vez las petroleras no lo han hecho, al menos al inicio del curso. El Brent (la referencia para el precio del petróleo en Europa) se encareció un 10% en el último año, pero el gasóleo lo hizo algo más del 5,6% en Galicia. Eso sí, es más caro repostar este año que el anterior. Y también subieron los precios en relación con agosto: casi un 1%. Galicia se mantiene, además, como la comunidad con los precios más prohibitivos de la España peninsular.

►Alimentación. De cada cien euros que gasta un hogar al mes, casi quince se destinan a la compra de alimentos. El Instituto Nacional de Estadística (INE) no ofrecerá datos detallados de la inflación de septiembre hasta mediados del mes que viene, pero hay una tendencia clara al alza. En lo que va de ejercicio el coste de la comida subió un 1%, con productos (como el aceite y derivados) que superan alzas del 7%. Entre los que más se encarecen están la carne de cerdo, de ave, los preparados de pescado, la fruta fresca y las legumbres. Por contra, se abaratan la carne de ovino, los huevos o las patatas. Este será el tercer año consecutivo en que los alimentos se encarezcan en la cuesta de septiembre.

Las hipotecas. El Euribor, indicador de referencia para la gran mayoría de los contratos hipotecarios en España, acumula doce meses de mínimos históricos consecutivos. En agosto cerró al -0,156% y, para los que deban actualizar ahora sus cuotas con el banco, el ahorro será de unos 55 euros anuales de media. Es un balón de oxígeno para gran parte de las familias, porque tanto los alquileres como las nuevas viviendas están al alza.

Hostelería. El INE calcula que cada hogar se gasta cerca de 2.800 euros anuales en servicios de turismo y restauración. En lo que va de año los precios se han encarecido un 4,3%. Los españoles se gastan más dinero en restaurantes y hoteles que en cultura, muebles y enseñanza.

Ingresos. El organismo estadístico español sostiene que también las nóminas han crecido algo más de medio punto (ocho euros al mes de media) y los convenios colectivos firmados hasta junio en Galicia incluyen un incremento salarial del 1,25%. En ambos casos son valores que están por debajo de la inflación, del 1,6%. Lo mismo sucede con los pensionistas: sus pagas solo se han revalorizado un 0,25%, una sexta parte de lo que se encarece el coste de la vida.