El Tesoro Público ha colocado este jueves 4.623,9 millones en bonos y obligaciones en la primera subasta tras la DUI, la aplicación del artículo 155 y coincidiendo con la comparecencia de exconsejeros del Govern ante la Audiencia Nacional, y lo ha hecho por encima del rango medio previsto y ofreciendo a los inversores una menor rentabilidad, con tipos más bajos en las cuatro emisiones de bonos y obligaciones.

Esta es la primera subasta en la que el Tesoro ha acudido al mercado después de la declaración unilateral de independencia aprobada por el Parlamento de Cataluña, la aplicación del artículo 155 de la Constitución para intervenir la autonomía, la convocatoria de elecciones en la comunidad autónoma y el cese de los miembros del Govern, coincidiendo además con la comparecencia de los exconsejeros del Govern ante la Audiencia Nacional.

Este jueves la prima de riesgo ha bajado hasta el entorno de los 108 puntos básicos, su menor nivel desde primeros de septiembre, y la Bolsa registra ligeras subidas tras haber abierto plano la jornada.

En concreto, el organismo dependiente del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad se había marcado un objetivo de entre 3.750 y 5.250 millones de euros para la primera subasta del mes de noviembre, por lo que el importe adjudicado se ha situado por encima del rango medio previsto. Además, la demanda ha alcanzado los 7.808,91 millones de euros, lo que supone 1,6 veces más que el importe adjudicado.

La subasta se ha celebrado en paralelo a la comparecencia ante la Audiencia Nacional de exconsejeros del Govern para declarar por la querella presentada por la Fiscalía que les acusa de delitos de rebelión, sedición y malversación de caudales públicos.

Asimismo, ha colocado otros 1.672,35 millones en obligaciones a 10 años, con cupón del 1,45%, a un tipo marginal del 1,471%, igualmente por debajo del 1,639% anterior de la puja del 19 de octubre; al tiempo que en obligaciones a 30 años, con cupón del 4,9%, ha captado 942,15 millones, con un interés marginal del 2,467%. En este caso también ha bajado la rentabilidad respecto a la referencia del 2,653% del pasado 6 de julio.

En la última subasta del Tesoro, celebrada el pasado 19 de octubre, cuando finalizaba el plazo para que el expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, aclarase al Gobierno si había proclamado la independencia de Cataluña, el organismo colocó 4.526 millones en bonos y obligaciones, en el rango medio previsto, pero los inversores pagaron menos por los títulos españoles e incluso el organismo empezó a pagar en los bonos a tres años.

El calendario de noviembre del Tesoro contempla otra subasta de letras a 6 y 12 meses el próximo martes día 14; una puja de bonos y obligaciones dos días más tarde, el jueves día 16, y otra de letras a 3 y 9 meses el martes día 21.