La Asociación Galega de Consumidores e Usuarios (Acouga) anunció ayer en A Coruña que se ha personado como acusación en la querella contra las excúpulas del Banco Popular y la propia entidad financiera, que instruye el Juzgado Central de Instrucción número 4 de Madrid, para defender "los intereses de los miles de accionistas minoritarios gallegos" y tratar de darles una solución. El presidente de la organización, Manuel Pérez Arias, explicó que desde la resolución y venta del Popular al Santander por un euroPopularSantander, Acouga recibió unas 2.000 consultas de clientes que tenían acciones de la entidad financiera. "La alarma generada y la cantidad de gente que reclama soluciones nos animó a participar en la demanda en los juzgados de Madrid", apuntó Pérez Arias,

El objetivo de la organización de consumidores es que todos los clientes que compraron acciones "antes y después" de la ampliación de capital de junio de 2016 puedan reclamar compensaciones por las pérdidas económicas sufridas con la venta del Popular al Santander por un euro Popular Santander.

La ofensiva judicial de Acouga cuenta con dos posibilidades: demandas individuales de nulidad por la vía civil para los clientes que compraron acciones del Popular en la ampliación de capital del año pasado -una opción que también emplea para los titulares de las obligaciones subordinadas emitidas en 2011, para lo que ya ha presentado demandas- y la personación en la querella contra la excúpula del banco para cubrir a aquellos clientes en los que ve más difícil que pueda aprobarse la nulidad, al tratarse de acciones del Banco Pastor reconvertidas en títulos del Popular. "Estamos admitidos como parte en una investigación que puede llevar a juicio al banco, a los consejeros y a la auditora PricewaterhouseCoopers por mala gestión y administración desleal y después plantear acciones civiles para exigir compensaciones a los afectados", resumió el secretario xeral de Acouga, Xosé Antón Pérez-Lema.

Esta segunda vía es más lenta, -"puede tardar unos dos o tres años"-, lo que animó a la organización a ofrecer esta posibilidad de defensa a los gallegos. Para beneficiarse de ella, los afectados solo tienen que hacerse socios de Acouga.