La tregua de las organizaciones sindicales frente a la patronal se agota ante la ausencia de un acuerdo sobre el incremento de los salarios, que cayeron en 2016 por primera vez en una década. De hecho el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, planteó ayer la posibilidad de renunciar a un acuerdo salarial con la patronal ante la falta de interés de los empresarios, que ya dejó sin pacto el año 2017, o convocar "movilizaciones de las de verdad, con paros de la producción". Durante su intervención en las jornadas confederales de acción sindical y negociación colectiva para 2018, Álvarez planteó a sus federaciones que aúnen una postura común y decidan si "abordan la negociación colectiva sin el paraguas" del acuerdo que firman patronal y sindicatos.

El sindicalista añadió que no hay ningún país de la UE "que no tenga una estructura paraguas de negociación colectiva". La segunda opción, dijo, son las protestas, pero no "concentraciones de juguete" sino "paros de la producción del país".