Los datos de la inflación en noviembre, publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el pasado jueves, evidenciaron una vez más el grave problema de Galicia con el precio de los combustibles. La comunidad se pone a la cabeza del encarecimiento de la vida este año, principalmente por el incremento registrado en los carburantes, superior al 4%, frente al 3,5% de alza en el conjunto del Estado. La Xunta reconoce que sus medidas para contener la subida sin tregua de la factura para llenar el depósito del coche en la comunidad son "insuficientes". En un intento por darle una vuelta a los números y matizar el coste medio del litro de gasóleo y de gasolina en la comunidad -con las tarifas más altas de toda la Península-, el director xeral de Enerxía, Ángel Bernardo Tahoces, apuesta por cambiar el sistema de cálculo y ponderar aquellas estaciones de servicio con más ventas en vez de usar los precios de todas por igual.

En la Comisión de Economía celebrada ayer en el Parlamento, el diputado socialista Abel Losada ironizó con "las visitas trimestrales" del presidente de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) a Galicia para "hacer propaganda" de la colaboración del superregulador y el Gobierno gallego. "Pero lo cierto es que los precios siguen subiendo y Galicia tiene los más altos, a pesar de que aquí los salarios son los más bajos", reprochó Losada, en referencia a la supuesta investigación que hace tres años anunció la CNMC sobre la situación del mercado minorista de productos petrolíferos en Galicia y que está todavía en "una fase preliminar".

Después de anunciar que el PSdeG llevará al Parlamento una iniciativa "para instar al Gobierno a que haga funcionar la CNMC", Abel Losada preguntó a Tahoces por posibles nuevas medidas para contener la escalada de precios de los carburantes.

Sin hacer ninguna referencia a la importancia del céntimo sanitario -el recargo autonómico del impuesto a los hidrocarburos que Galicia subió al máximo posible desde 2014-, el director xeral de Enerxía esgrimió que casi el 43% del coste de los combustibles es carga fiscal -"IVA y Especiales", dijo- y que es "un precio libre" que se mueve "por la ley de la oferta y la demanda". "Estamos poniendo todos los mecanismos a nuestro alcance", aseguró, con el decreto para facilitar la apertura de gasolineras independientes y la vigilancia de las cuotas de mercado máximas permitidas. "¿No resultan suficientes? No", reconoció. "¿Son necesarias? -añadió- Sí".

Alza que duplica la media

Los precios siguen su escalada alcista, aumentan el doble que la media estatal, a pesar de que, según Tahoces, las estaciones de servicio independientes representan ya "una cuarta parte del total". En 2015 solo se abrió un establecimiento; en 2016 fueron 7; y este año hubo 15 y otras 11 están en trámite. En total, 23 aperturas y casi una docena de camino.

"Hemos abierto un expediente sancionador muy importante a una estación de servicio que no consiguió la inscripción en el registro de ventas minoristas porque es abanderada y vendrán muchos más expedientes", anunció Ángel Bernardo Tahoces, que solo mencionó de pasada la solicitud de investigación a la CNMC para "tomar decisiones en el menor plazo posible".

La Xunta, de la mano del Consello Galego da Competencia, está elaborando una guía de buenas prácticas para involucrar a todas las administraciones gallegas en las medidas tendentes a bajar los precios de los combustibles. "Y no se restrinja la apertura de nuevos establecimientos", apela Tahoces, partidario de que cada centro comercial y cada parque empresarial puedan contar con una gasolinera.

Losada le recordó la importancia del céntimo sanitario, que cualquier modificación en la fórmula para medir los precios solo será un parche y los beneficios "millonarios" de las petroleras. "Inconcebible el beneficio de Repsol, pero hay que tener en cuenta que este año hizo desinversiones", respondió Tahoces.