Los pensionistas que reciben una paga no contributiva cobrarán antes del 10 de enero el complemento extraordinario de la Xunta, que volverá a ser de 206 euros tras siete años sin subidas. El Consello de la Xunta aprobó ayer continuar con esta paga extraordinaria, en la que invertirá 8,2 millones de euros y llegará a los bolsillos de unos 40.000 pensionistas, aquellos que tengan una prestación no contributiva de la Seguridad Social, del Fondo de Asistencia Social y del Subsidio de Garantía de Ingresos Mínimos.

El ingreso se hará de manera automática mediante transferencia bancaria y en un único pago a las personas que cumplan los requisitos, por lo que los beneficiarios no deberán solicitar su cobro.

Esta bonificación, que como recalcó ayer el presidente de la Xunta solo tienen tres comunidades, fue instaurada por el Gobierno bipartito de PSOE y BNG en 2009 y solo fue actualizada una vez, en 2011, por lo que está congelada desde hace siete años. Feijóo señaló ayer que "no es fácil" mantenerla.