Los trabajadores de la central de Meirama apremian a Gas Natural Fenosa, propietaria de la planta, a decidir el futuro de la térmica con celeridad y despejar la incertidumbre que pesa sobre los 100 empleos directos que dependen de la actividad de las instalaciones de Cerceda. A este centenar de puestos de trabajo, detallan los representantes sindicales de la plantilla, se suman otros tantos dependientes de auxiliares y también numerosos empleos indirectos, de negocios próximos a la térmica de Meirama. "Proveedores, restaurantes y otras actividades que suman muchos miles de personas", explica el presidente del comité de empresa, Bautista Vega.
La actividad de la central es vital para el concello de Cerceda, motivo por el que la plantilla pidió el apoyo al consistorio local e instó a presionar a Gas Natural Fenosa para que mantenga la actividad y el empleo en este municipio coruñés.
Apoyo del alcalde de Cerceda
Los representantes del comité de empresa se reunieron ayer -durante el encierro en la sede del concello- con el alcalde de Cerceda, José García Liñares, que les trasladó su apoyo y su compromiso de que luchará para garantizar la continuidad de la central térmica de Meirama.
