La futura ley de cambio climático de Baleares prevé que todos los vehículos que circulen por las islas en 2050 sean eléctricos. El objetivo de esta medida es reducir las emisiones de CO2 del archipiélago un 35% y hasta el 90% en las ciudades y núcleos urbanos. Es el calendario establecido para que todo el parque automovilístico de las islas sea eléctrico en 2050. El turista que visite las islas desde el continente en su propio vehículo por carretera y barco ya no podrá hacerlo después de 2025 si su coche es diésel ni después de 2035 si su coche es de gasolina.