El Santander camina ya hacia su integración interna. Es solo cuestión de tiempo, muy poco, que el Pastor desaparezca como filial y marca en Galicia. Ya en el primer encuentro mantenido con los representantes de los trabajadores la pasada semana para iniciar las negociaciones para homologar las condiciones laborales tras la incorporación del Popular y el Pastor, el grupo adelantó que quiere que la integración concluya este año. El consejo de administración aprobó ayer la absorción del Pastor y Popular Banca Privada por parte del Popular que, a su vez, será luego integrado en el Santander. Cuando el Ministerio de Economía autorice la operación y la fusión vaya adelante, "Banco Santander adquirirá, por sucesión universal, la totalidad de los derechos y obligaciones de Popular, que incluirá, en consecuencia, los de Banco Pastor y Popular Banca Privada", comunicaba ayer el grupo presidido por Ana Patricia Botín a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Con una política comercial única, toca ahora "la integración jurídica" del Popular en Santander. Una medida necesaria, justifica en el proyecto de fusión, "de cara a alcanzar el pleno potencial de las sinergias de costes e ingresos derivadas de la adquisición" y conseguir "la completa integración" de los negocios de todas estas todavía filiales dentro del Santander. "La decisión de llevar a cabo la fusión sigue la línea de la política de racionalización de la estructura societaria que viene desarrollando el grupo Santander en los últimos años -señala, en referencia a otros casos, como la desaparición de Banesto- con el objetivo de simplificar la gestión de este, facilitar la asignación eficiente de recursos y reducir los costes administrativos y las obligaciones de índole mercantil, contable y fiscal".

Después del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) activado este año para ajustar los servicios centralesservicios centrales de ambas entidades -1.100 salidas, el 98% de carácter voluntario-, el Santander recuerda que el redimensionamiento de la red y la plantilla está todavía pendiente y "no se ha tomado ninguna decisión en relación con las posibles medidas de índole laboral que pudiera ser necesario adoptar para proceder a la integración de las plantillas como consecuencia de la fusión principal". Galicia, dada la fuerte penetración del Pastor, segunda entidad financiera de la comunidad, será una de las zonas críticas cuando llegue el momento. Suman alrededor de 400 oficinas y superan los 2.000 trabajadores.

Al cierre del pasado ejercicio, según los datos recogidos por la Asociación Española de Banca, el Pastor arrojó unas pérdidas de 205,2 millones de euros tras la limpieza de balance impulsada por el Santander Pastor Santandercuando asumió las riendas de todo el grupo Popular después de su resolución. Los depósitos de la clientela ascendían a algo más de 7.800 millones de euros y el saldo del crédito concedido rondaba los 3.900 millones.