Antón López Mosquera.A CoruñaCapital gallego toma el control del BBVA, el segundo grupo financiero español y el décimo del mundo, tras la entrada de Manuel Jove como principal accionista. El empresario coruñés se ha hecho con el 4,9% del banco presidido por el lucense Francisco González, quien suma a su participación del 0,039%, el control delegado de un paquete de acciones superior al 7%. El banco dirigido tradicionalmente por la oligarquía vasca pasa queda en manos de dos gallegos, una vez que Jove haya cerrado la mayor operación a título personal de la historia financiera europea, por valor de 3.285 millones de euros.El patrimonio de Manuel Jove ya tiene destino tras la venta del 54.6% que tenía en Fadesa a Fernando Martín , por la que obtuvo 2.208 millones. El empresario coruñés se ha planteado la entrada en el BBVA como una "inversión financiera permanente" y "sin vocación de intervenir en la gestión", según informó ayer Iaga Gestión de Inversiones, la sociedad vehículo inversor del empresario, a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). La operación ha sido intermediada por el banco de inversión UBS y a los actuales precios de mercado, la adquisición del 4,9% del capital del banco tiene un valor aproximado de 3.285 millones de euros. La importante actuación financiera es sobre todo una excelente operación fiscal para Jove ya que el impuesto de sociedades obliga a abonar a Hacienda un 35% de las plusvalías generadas de la venta, mientras que si éstas se reinvierten la tasa no supera el 18%. Con la operación, Jove se ahorraría el 13% de impuestos, unos 470 millones de euros por las plusvalías obtenidas con la venta de la inmobiliaria y con la venta a ACS de su participación en Fenosa por la que obtuvo 550 millones.La entrada del empresario coruñés en el BBVA se produce de forma amistosa, según fuentes cercanas a la operación que destacan que Manuel Jove mantuvo varias reuniones con Francisco González para informarle. Las mimas fuentes señalan que en los tres últimos meses se dieron cita en A Coruña representantes de los principales operadores bursátiles europeos, entre ellos City Group y Morgan Stanley. La llegada al accionariado del BBVA de Jove contrasta con la entrada de Luis del Rivero, presidente de Sacyr Vallehermoso que tomó un 3% de las acciones del banco en 2004 y pretendía sentarse en consejo de administración e incluso debilitar la posición del presidente de la entidad financiera Francisco González. El objetivo inmediato del empresario coruñés no es dirigir el banco ni participar en la gestión pero no descarta ocupar su puesto en el consejo al que le da derecho su participación. Manuel Jove no llega al BBVA con una clara vocación de permanencia sino que su presencia en la entidad que preside Francisco González dependerá de muchos factores, entre otros de la evolución bursátil del banco.Manuel Jove no ha invertido en esta compra mas de 1.000 millones de euros de su patrimonio ya que, según fuentes cercanas a la operación, los 2.200 millones restantes estarían avalados por el bando de inversión UBS que intermedió en la transacción. A Jove no le resultó complicado obtener este respaldo por la previsión de reparto de dividendos del BBVA.El empresario realizó la comunicación preceptiva al Banco de España, solicitando su no oposición. La apuesta por la firma bancaria parte parte de una "apreciación muy positiva de las posibilidades de creación de valor de BBVA a largo plazo", según destaca el comunicado a la CNMV.Fuentes próximas a Jove señalan que la dirección del BBVA ha estado informada "en todo momento" sobre la operación y ha valorado "positivamente" la confianza de Manuel Jove en el proyecto del grupo. Esta participación colocaría a Jove como primer accionista individual del BBVA y sólo superado por Chase Nominees, que tiene depositada una participación del 5,7% es como entidad custodia. El BBVA, que en 2007 cumple su 150 aniversario, es el segundo grupo financiero español, sólo por detrás del Santander, está presente en más de 30 países, el pasado año obtuvo 4.736 millones de euros de beneficios y tiene una capitalización bursátil superior a los 64.000 millones.El banco dio ayer la "bienvenida" a la entrada de Jove en el capital de la entidad, y afirmó que le parece "muy bien" que un inversor "tan solvente" confíe "de forma estable" en el BBVA, declaró un portavoz de la entidad. "Estamos muy satisfechos, y como él mismo ha dicho, su inversión es financiera y estable, pero sin vocación de intervenir en la gestión del banco", indicó. Asimismo, incidió en que la compra no cambia los criterios de gobierno corporativo ni su posición contraria a los núcleos duros.Una de las cuestiones que el BBVA se ha apresurado a aclarar es que no ha financiado la operación, en la que no hay ningún conflicto de intereses, ya que el dinero invertido por Jove procede de su patrimonio personal. Los ingresos obtenidos por Jove con la venta de Fadesa, su participación del 4,08% en Unión Fenosa, más los 227 millones logrados con la OPV en la salida al parqué de la inmobiliaria, suman un total de 3.027 millones de euros, 258 millones menos de los necesarios para cubrir la operación cerrada ayer entre el banco suizo UBS e Iaga Gestión de Inversiones, una de las tres sociedades mediante las cuales el ex presidente de Fadesa controlaba sus participaciones en la inmobiliaria. Inversiones Frieira y Frieira Gestión de Inversiones, junto con Iaga, fueron los "accionistas vendedoras" del 54,31% de Fadesa a Almarfe, SL u Agosuier, SL, sociedades respectivamente del Grupo Martinsa (Fernando Martín) y de Antonio Martín (los adquirientes), como estipulaba el contrato de venta.Fuentes del entorno del empresario indicaron que la pasada semana Jove se reunió con Francisco González para anunciarle su deseo de entrar en el capital de BBVA con una participación significativa, intención que transmitió también al Banco de España. El ex presidente y máximo accionista de Fadesa ha realizado esta operación después de que a finales de 2006 vendiera la participación de control que tenía en esta inmobiliaria, así como la del 5% con que contaba en Unión Fenosa. De la venta a Fernando Martín del 54,6% que tenía en Fadesa obtuvo 2.208 millones de euros, a los que se sumó los 550 millones obtenidos con la venta a ACS de su parte en Fenosa. Algunos de los financieros de renombre han sucumbido en la carrera por convertirse en el segundo máximo accionista del BBVA. Empresarios inmobiliarios, como Fernando Martín, siempre mostró interés por aumentar su presencia en el banco. El actual primer accionista y presidente de Fadesa siempre ha reconocido contar con una inversión minoritaria y a título personal en la entidad, lo mismo que Luis Portillo, presidente y máximo accionista de Colonial. Recientemente indicó que estudia elevar la participación de alrededor del 1% que actualmente tiene en BBVA. El plan diseñado desde Sacyr Vallehermoso, el grupo de construcción y servicios que preside Luis del Rivero, para entrar en el el accionariado del banco tuvo su punto y final en febrero de 2005. Los planes se iniciaron meses antes mediante la toma de un 3,1% de su capital y el nombramiento de consejeros. Obtuvo plusvalías en la operación de 148,63 millones de la la venta de las acciones y opciones que había tomado en el capital del banco. Pero la carrera por conseguir posicionarse con fuerza en el banco se llevó por delante al empresarios madrileño Juan Abelló, vicepresidente de Sacyr y, por aquel entonces, con un sillón en el consejo de Administración de Santander Central Hispano.