El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, defendió ayer su gestión al frente del Gobierno autonómico al reivindicar que permite que la comunidad sea "financieramente viable" y no pedir dinero al Ministerio de Hacienda a fin de mes. Es lo que hacen otros "colegas", contrapuso, en relación a aquellos que buscan la "desconexión" de España -por Cataluña- que en su opinión es "desconexión de los problemas reales".

Feijóo participó ayer en un desayuno informativo de Europa Press en Madrid, patrocinado por Popular, Suez, Fujitsu, Telefónica, Altadis y KPMG. El acto contó con la presencia entre otros de la presidenta del Congreso, Ana Pastor, la vicepresidenta del Gobierno en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, de los ministros de Defensa, Pedro Morenés, Empleo, Fátima Báñez, Agricultura, Isabel García Tejerina, el presidente de la Región de Murcia, Pedro Antonio Sánchez, y la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal.

El presidente gallego defendió su apuesta por Galicia como nacionalidad histórica dentro de España, que, según dijo, en lugar de independizarse busca estar más conectada con el resto y que reivindica su autogobierno. "No desconectamos de nadie, sino que procuramos conectarnos más y mejor", aseguró, marcando claramente la distancias con Cataluña.

Sostuvo que si el resto de ejecutivos autonómicos hubieran logrado el déficit del suyo, España no tendría problemas para cumplir los objetivos de estabilidad comprometidos con la Unión Europea y rechazó que tenga nada que ver con el sistema de financiación autonómica. Añadió que el modelo fue pactado por la Generalitat de Cataluña con el Gobierno del PSOE y que no beneficia a su comunidad. "Pero les puedo asegurar que Galicia está mejor que en el 2009 y 2012 y no le hemos causado problemas a nadie", reivindicó, para concluir que su comunidad juega "en otra liga, en una liga superior donde lo que cuenta es el rigor en la gestión de las cuentas públicas".

Preguntado por si una victoria en los comicios gallegos podría ser un trampolín a la política nacional, respondió que es "ya un político nacional". "¿Ser representante del Estado en la comunidad autónoma no es ser político nacional? ¿Un presidente autonómico no hace política nacional?", preguntó a su vez Feijóo. Así, argumentó que el jefe de un ejecutivo regional gestiona "todos servicios públicos de su comunidad" y es una "autoridad ordinaria del Estado en la comunidad".

Por otra parte, el PP gallego se reivindica, en su programa para las elecciones del 25 de septiembre, como defensor del autogobierno y se propone, "con la mejora de la situación económica y de los ingresos" en las administraciones públicas, "recobrar la agenda de traspasos pendientes" con Madrid, "empezando" por la transferencia de la AP-9.

Por último, el presidente provincial del PP de A Coruña y cabeza de lista en las próximas elecciones, Diego Calvo, aseguró ayer que su partido es el único "que presenta un programa factible, creíble y listo para gobernar".

En una rueda de prensa junto a los también candidatos Beatriz Mato, Álvaro Pérez, Martín Fernández Prado y Gonzalo Trenor, y por la portavoz popular en la ciudad de A Coruña, Rosa Gallego, valoró el programa electoral para las autonómicas del 25 de septiembre.

Calvo defendió que su formación es la única que presenta un programa "factible, creíble, con garantías de poder llevarse a cabo y listo para gobernar".