Media hora antes de que diesen las doce, el auditorio de Palexco tenía sus 1.500 butacas casi llenas, no en vano había militantes y simpatizantes del PSOE que se habían levantado muy temprano para poder ver en directo al líder de su partido y candidato a la Presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez. Le recibió Palexco con el himno del puño y la rosa a tope, con cientos de banderas rojas ondeando y entre gritos de "presidente, presidente".

Sánchez se erigió como única alternativa real sobre la mesa en las próximas elecciones. "La única garantía de cambio es el PSOE y no votar al PSOE significa regalar el voto al presidente del paro, de la desigualdad y de la corrupción, que es Rajoy. Así que, a votar todos al PSOE", gritó ayer, rozando el enfado Pedro Sánchez, que también se autoproclamó ante el abarrotado auditorio de Palexco "ganador" del debate a cuatro de la noche anterior.

El candidato a la Presidencia del Gobierno no quiso perder la oportunidad ayer de apelar a la memoria, a la "raza que lleva dentro" cada socialista y a los logros del PSOE, como la puesta en marcha de la ley de violencia de género, la de memoria histórica, la lucha contra el terrorismo de ETA o la aprobación de la ley de interrupción voluntaria del embarazo. "Sentíos orgullosos y que no nos den lecciones", dijo en referencia a Podemos, que le reprocha que el PSOE "hace una cosa en el Gobierno y otra en la oposición". Cargó Sánchez contra Pablo Iglesias, diciendo que se ama "a sí mismo sobre todas las cosas" y que esa idea le hará no apoyar al PSOE en una posible investidura de Sánchez como presidente. "Pablo Iglesias dice que está dispuesto a que gobierne el PP con tal de que no lo haga el PSOE", dijo Sánchez del que se presenta como su competidor por el voto progresista.

Sin nombrarle, Albert Rivera también recibió su ración de crítica, ya que Sánchez explicó que, si había sido de Nuevas Generaciones, si "apoya los copagos", la reforma laboral y otras propuestas, "aunque tenga veinte años menos, es del PP", resumió Sánchez. En el mitin sufrió dos interrupciones, la de un hombre que le pidió que derogase la ley hipotecaria y al que explicó que sí lo haría, y la de un emigrante retornado, que le gritó que no se olvidase de ellos. Y Sánchez dijo que no, que lucharía contra la "injusticia" que estaban sufriendo.

La candidata al Congreso por la provincia de A Coruña, Pilar Cancela, que se expresó en gallego, al igual que el secretario general del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, quiso ayer escribir una "carta a los Reyes Magos" dirigida a Pedro Sánchez, en la que pidió ayuda para los trabajadores de Alcoa, que llevan ya más de un año luchando para que no se cierre la empresa; también pidió apoyo para las familias que viven de la pesca de cerco -Sánchez se fotografió con la pancarta de los marineros a las puertas de Palexco-, y para las que reclaman un precio justo por la leche que producen más allá de los "18 a 22 céntimos por litro" que ahora les pagan. "¿Quién puede vivir de eso?", se preguntó Cancela, que reivindicó, ella también, el papel de los socialistas a través de la historia y advirtió a los partidos emergentes. "A los socialistas, lecciones, ninguna", dijo. Una frase que repetiría minutos después, Pedro Sánchez.

Tras Cancela, tomó la palabra Besteiro, que prometió que Sánchez será "un presidente más gallego" de lo que lo ha sido "Rajoy en estos últimos cuatro años" y puso el foco en la hucha de las pensiones. "A los socialistas no nos importan las encuestas del CIS, nos importa la caja de las pensiones", dijo Besteiro, y es que en solo cuatro años ha pasado de tener 70.000 millones de euros a unos 30.000.

La que secretaria de la agrupación local, Mar Barcón, abrió el mitin con un discurso similar al que había pronunciado unas horas antes, el líder de Podemos, Pablo Iglesias, en el cierre del debate a cuatro televisado. Barcón apeló a la memoria y a la sonrisa y gritó: "Las mujeres te vamos a hacer presidente el 20 de diciembre, Pedro".

El presidente de la Diputación de A Coruña, Valentín González Formoso, hizo un viaje por los logros socialistas del pasado. "No nos llama la atención que sea registrador de la propiedad el hijo o la hija de un mecánico o un agricultor", comentó, aunque aseguró que sí tiene "importancia". "El primer licenciado que hubo en la mayoría de las familias gallegas fue con Felipe González", explicó y ahondó en que la defensa de lo público y la igualdad de oportunidades "están en el ADN del socialismo".