Alfonso Guerra nunca tuvo pelos en la lengua y ayer lo demostró en Mieres ante algo más de medio millar de asistentes que optaron por pasar la mañana de sábado en un polideportivo escolar, con un frío penetrante, para meterse "socialismo en vena. Guerra no dejó entre los rivales políticos de su partido títere con cabeza. Arremetió contra "la izquierda imbécil" y "la derecha boba" que "no saben cuándo hay que ir a una guerra".

"A la de Irak no, hombre, no, pero al Estado Islámico, que tiene territorio y sedes, que obliga a niños de nueve años a disparar a las cabezas de prisioneros y lo difunde, a esos hay que combatirlos hasta eliminarlos", ironizó. Para Guerra, que arrancó numerosos aplausos y risas a su público -aunque se alargó más de una hora- el número uno de Ciudadanos, Albert Rivera, "parece que tiene un primo en medio, Albert Primo de Rivera".

A su juicio, la vicepresidenta Soraya Saénz de Santamaría ganó en el debate televisivo al ausente Mariano Rajoy, porque "miente mejor". Y bromeó con que el presidente del Gobierno en funciones va a tener que "hacer la cena de Navidad en Alcalá Meco porque está lleno de sus amigos". Tampoco le ahorró, con su acento andaluz, alfilerazos a Pablo Iglesias: "Si recomiendas un libro de Kant no digas el título mal, hombre, al menos léete la tapa". El exvicepresidente se abonó a la tesis de que hay una "conjura" contra el PSOE, orquestada por "la derecha mediática", porque "aunque el PP caiga, si el PSOE baja más, gana". "Crearon un grupito de retórica revolucionaria y política práctica para quitarle votos al PSOE", afirmó, en referencia a Podemos, que "dice que es nueva política, pero usa tretas de política vieja, tan vieja que parece franquista". En su opinión, el socialismo sigue vigente y se resume en activar políticas para que "nadie tenga tanto como para poner de rodillas a nadie y que nadie tenga tan poco como para verse obligado a ponerse de rodillas".