El alcalde de A Coruña, Xulio Ferreiro, se convertirá en el principal rival a batir por el PP gallego en la campaña electoral del 26-J. El objetivo de los populares en la próxima cita con las urnas ya no será el PSOE, sino Podemos y las mareas, formaciones a las que tratarán de desacreditar poniendo a los regidores del cambio como ejemplo de "mala gestión". Y con este objetivo, el PP ha publicado un listado de 290 medidas adoptadas en los ayuntamientos que califican de "extremistas". En la comunidad gallega, aunque sacarán a relucir también algunas de las políticas adoptadas en el Concello de Santiago, dirigido por Martiño Noriega (Compostela Aberta), ponen el foco principalmente en el primer año de gestión del regidor coruñés, el más cercano a Pablo Iglesias.

En las pasadas elecciones municipales, la Marea Atlántica reventó todas las previsiones al irrumpir en María Pita con diez concejales. La mayoría absoluta con la que el PP había gobernado los cuatro años anteriores -14 ediles- naufragó en medio de la fuerza de la candidatura de Ferreiro e hizo retroceder al partido capitaneado por Carlos Negreira a los comicios de 2007, en los que los populares coruñeses se hicieron con diez asientos.

Además de irrumpir con fuerza en A Coruña en las municipales de mayo de 2015, las mareas engulleron a los partidos tradicionales en el conjunto del escenario municipal gallego y también se hicieron con el bastón de mando de las ciudades de Santiago y Ferrol.

El descontento ciudadano era tal que las fuerzas de la izquierda rupturista desbordaron los buenos resultados que le auguraban las encuestas. El PP de Feijóo cosechó los peores resultados de su historia en Galicia, con 186.000 votos menos y nueve puntos por debajo de los resultados de los comicios municipales de 2011. Estos resultados solo le permitieron mantener una de las tres diputaciones que gobernaba, la de Ourense.

En su carrera hacia La Moncloa, Podemos también convertirá a Ferreiro en protagonista de su campaña. La formación liderada por Pablo Iglesias intentará vender en las próximas semanas que saben "ganar elecciones y gobernar" y para ello se apoyarán precisamente en los alcaldes del cambio, pero no en todos, y citan expresamente a Xulio Ferreiro, Ada Colau y José María González Kichi.

Anova

Hace justo un año tres alcaldes del cambio se ponían al frente de los consistorios de A Coruña, Santiago y Ferrol. Pero el regidor compostelano pertenece a Anova y es la mano derecha de Xosé Manuel Beiras. Ferreiro, sin embargo, al frente de Marea Atlántica, se convirtió en el principal aliado de Podemos y contrapeso a Anova en el frente de izquierdas creado en Galicia para concurrir a las generales y que ahora prepara también el asalto a los comicios autonómicos.

A Coruña es, por ello, un bastión importante para la formación de Pablo Iglesias. El número dos de Podemos, Íñigo Errejón, y el portavoz de IU, Alberto Garzón, participarán en un mitin en la ciudad herculina el próximo 19 de junio. Y además también se ha anunciado que Ferreiro compartirá escenario con Pablo Iglesias en la campaña del 26-J.

Ese mismo flanco es el que quiere atacar el PP, que ha convertido a Podemos y a las mareas gallegas en su principal rival a batir, por encima incluso del PSOE. En Galicia el PP gallego centrará su mensaje, de hecho, en defender "la coherencia política" de los populares frente a la "irresponsabilidad" del resto de fuerzas.

La dirección nacional del PP ha puesto sobre la mesa un listado de las "malas prácticas" de los ayuntamientos del cambio. Así, censuran "la falta de respeto a los símbolos nacionales" y citan A Coruña, donde la Marea Atlántica -señalan- "colocó una bandera republicana en la fachada de uno de los edificios municipales".

Los populares aluden al "sectarismo" que se practica en estos municipios y así critican que Ferreiro haya excluido al PP de las negociaciones para aprobar los presupuestos municipales. Y recuerdan que "la primera recepción" de la Marea fue al embajador de Venezuela. En este apartado el Concello de Santiago también se lleva su parte y así mencionan como falta de déficit democrático que la corporación compostelana recomiende la lectura de Exhortación a la desobediencia de Xosé Manuel Beiras y que hayan eliminado las ayudas a Red Madre.

El PP también airea la ofensa a las costumbres y tradiciones locales de estos alcaldes. Recuerda que Martiño Noriega no asistió a la apertura de la Puerta Santa ni a la Ofrenda Nacional al Apóstol y a Ferreiro le echa en cara que no apoye las procesiones de Semana Santa y deniege los eventos de la Asociación de Meigas de las Hogueras de San Juan.