-¿Cuáles son sus proyectos clave para el mandato?

-La primera y prioritaria, aprobar el plan general, que está totalmente acabado, a expensas de informes sectoriales que faltan. También dotar de saneamiento y abastecimiento al 100% del municipio y propuestas novedosas como partidas por parroquia y consejos parroquiales para decidir qué obras hacer. También aumentar servicios sociales y acondicionar el entorno del río Mero.

-Algunas son de 2011. ¿Significa que no cumplió el programa?

-No. Nos queda lógicamente la espinita clavada de no haber conseguido aprobar el plan general y ha sido porque nos encontramos el contrato con una UTE y nos dio mucho trabajo, estuvimos a punto de rescindir el contrato. Se perdió un año y medio. Del Mero ya hay proyectos terminados y se limpió el cauce. Queda la segunda parte.

-¿Qué expectativas tiene?

-Esperamos obtener la mayoría, la confianza de los ciudadanos. Sobre todo porque son unas elecciones locales y esperamos que tengan en cuenta la transformación de Cambre en estos cuatro años.

-¿Volvería a gobernar en minoría después de la experiencia?

-Cuando me presenté en 2011 adquirí un compromiso por dos mandatos. Si tengo que volver a gobernar en minoría lo haré, aunque sé que es muy difícil, porque la oposición en estos cuatro años no nos ha ayudado en absoluto; ha mirado más sus intereses que los de los vecinos. Porque proyectos sí hemos puesto encima de la mesa y algunos los han rechazado.

-Antes de gobernar en minoría, ¿intentaría un pacto?

-Nosotros vamos a pactar con los vecinos y vamos a pactar ahora. Los resultados de las elecciones se verán y veremos qué opciones tenemos. Pero nuestro pacto es exclusivamente con los vecinos. Mi objetivo es la mayoría absoluta. Ni descarto ni preveo ninguno.

-La oposición le acusó de poco dialogante, de "ordeno y mando", según García Patiño.

-Eso son excusas de mal pagador. Hicimos algo que nunca se hizo en Cambre en los treinta años que gobernó el PSOE, entre ellos el señor García Patiño, entregarles los presupuestos un mes antes, llamarlos veinte días después para ver sus propuestas y que no presenten ninguna? A mí me pueden tachar de lo que quieran, pero de ordeno y mando no. El segundo año no aprobaron los presupuestos porque no quisieron. Presentamos una cuestión de confianza porque yo no sé trabajar sin presupuestos y no fueron capaces de desalojarnos del Gobierno. No se ponen de acuerdo ni para tomar café. Si nos quisieran echar, tuvieron dos oportunidades en un solo mandato.

-Patiño dice que fue por responsabilidad y porque las administraciones cortarían el grifo.

-Las administraciones no tienen en cuenta el color político. Lo que pasa es que el señor Patiño es capaz de gestionar.

-¿Qué consecuencias tendrá la cuestión de confianza?

-Creo que la cuestión de confianza que presenté ha dejado claro que yo soy un alcalde que no está apegado a la silla.