Raúl Vieira: "La mala gestión de los restos de medicamentos es muy peligrosa"

-¿Cuál es el trato correcto que debe recibir un residuo médico?

-Los restos de fármacos no se asimilan a las cajas, prospectos y blisters en los que están contenidos, sino que se deben tratar como residuos especiales.

-Entonces, ¿puede considerarse que los medicamentos son basura asimilable al resto de residuos, como se ha dicho?

-No. Los principios activos de los que están compuestos los fármacos son biocidas, es decir, pueden matar cualquier microorganismo. Por esa razón, los medicamentos que ya no sirven deben someterse a un proceso de esterilización completa o a su incineración. Serían asimilables a los residuos urbanos si previamente hubiesen sido esterilizados completamente.

-El depósito indiscrimado de estos fármacos con el resto de elementos orgánicos, tal y como ha desvelado LA OPINIÓN A CORUÑA que sucede en la planta de Areosa en Cerceda, ¿es peligroso?

-Es fundamental evitar el incorrecto almacenaje de cualquier tipo de medicamentos. Entiendo que los vertederos están desbordados y no tienen capacidad para tratar las miles de toneladas de residuos que reciben pero este exceso de basura, en el caso de elementos peligrosos como los fármacos, puede tener consecuencias fatales porque en caso de que haya una mala gestión de los residuos, pueden acabar pasando a los cauces fluviales, a las aguas subterráneas...

-¿Le consta que Sogarisa siga recibiendo deshechos citotóxicos, las basuras más peligrosas de la planta Sigre?

-Estos materiales más peligrosos sólo se trataron en Sogarisa en los dos primeros años de la puesta en funcionamiento de Sigre [de 2002 a 2004], a partir de ese momento, Sogama se ocupó de la gestión de todos los fármacos.

-¿Hasta qué punto es peligroso que un fármaco entre en contacto con el medio ambiente?

-Sólo diré que existe un grupo de investigación, de ingeniería química, especializado en el estudio de la presencia de compuestos farmacéuticos en aguas residuales y que trabaja en estrategias para mejorar la degradación de esos compuestos. Con esto quiero dar idea de la importancia de evitar que los compuestos entren en contacto con el agua.

-¿Por qué son tan nocivos?

-Los principios activos de un fármaco están pensados para curar, para matar la flora o la fauna bacterianas; si ese biocida entra en contacto con las aguas que se tienen que depurar, matarán la flora bacteriana, lo que afectará a organismos acuáticos fundamentales, por ejemplo.

-¿Este tratamiento indebido puede llegar a ser perjudicial para la salud?

-Los sistema de potabilización de agua normalmente no son eficaces contra estos tipos de fármacos. Las medicinas de las que estamos hablando, si se tratan de forma inadecuada, pueden contaminar las aguas y contribuir al desarrollo de cepas resistentes a los antibióticos. Por cosas como esta, entre otros motivos, están volviéndose a padecer enfermedades que creíamos que estaban erradicadas en el llamado primer mundo.

-¿Como cuáles?

-Como el tifus o la tuberculosis, por ejemplo.

-¿Qué está fallando?

-Nos supera la gestión ulterior. Hay que vigilar los residuos que se almacenan e invertir en infraestructuras nuevas. Cuanto más llueve, y este año está lloviendo mucho, más fácil es que estos restos lleguen a ríos y cauces fluviales, con los peligros que conlleva. Hay que controlar cuál es el grado de impermeabilización de los vertederos, ver si tiene posibles fisuras porque todos los deshechos que alberga pueden acabar contaminando aguas dulces. Los recursos naturales son escasos y debemos cuidarlos. Los políticos deben dejarse asesorar por los expertos. Sólo en Galicia hay técnicos buenísimos, muy bien preparados. La calidad medioambiental está directamente relacionada con la calidad de vida.