El decreto del gallego, el concurso eólico, la fusión de las cajas... Algunas de las propuestas del Gobierno de Feijóo han abierto la caja de los truenos. Una de las próximas reformas que desatará un nuevo debate será la reforma del modelo territorial de Galicia. El punto de partida no podría ser mejor: todos los grupos parlamentarios coinciden en la necesidad de abordar la reorganización administrativa en la comunidad. Sin embargo, los peros surgen cuando PP, PSdeG y BNG ponen sobre la mesa sus alternativas.

Uno de los proyectos que más dolores de cabeza ha causado al tripartito catalán fue aprobado esta semana. Cataluña olvida las cuatro actuales provincias y crea siete veguerías, una demarcación supramunicipal de origen medieval que existió desde el siglo XII hasta el XVIII. El Gobierno de Feijóo también se propone rediseñar el modelo territorial gallego. Sin falta, esta legislatura será el turno de Galicia: Administración autonómica y local armarán en los próximos cuatro años el nuevo puzzle territorial gallego.

El pistoletazo de salida lo dio el propio presidente de la Xunta al manifestar su disposición a abrir el debate sobre las fusiones o alianzas entre municipios. Y ya parece tener claro que la población será un factor determinante a la hora de evaluar esa fusión: "Los que tengan menos de 1.500 habitantes deben buscar fórmulas para mancomunarse", apuntó Feijóo en una visita a Málaga el pasado mes de diciembre.

Xunta y grupos parlamentarios dan por hecho que será un trabajo a largo plazo y que requerirá de la implicación de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp). "Todavía no hay un criterio para la reorganización del modelo territorial actual", reconoce el director xeral de Administración Local, Norberto Uzal, al tiempo que alude a diversos estudios que consideran "imposible" la suficiencia política, financiera y técnica de un municipio con menos de 1.500 habitantes. "Pero los concellos pueden optar por la fusión o la integración. Eso quedará a iniciativa de los municipio", aclara Uzal.

Para avanzar en la reforma del modelo territorial de Galicia, la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza organizará el próximo mes de marzo unas jornadas para divulgar la experiencia de otros países europeos que ya se acometieron la reforma de su sistema. A partir de ahí, Galicia empezará a recorrer un nuevo camino que, de optar por la fusión o la asociación de ayuntamientos con menos de 1.500 habitantes -un total de 54: siete en A Coruña, 11 en Lugo, 35 en Ourense y uno en Pontevedra-, el nuevo mapa municipal de Galicia pasaría de los 315 concellos actuales a 261.

Cerca de 30.000 núcleos de población, 3.778 parroquias, 315 municipios, 53 comarcas y cuatro provincias. Esta es la estructura territorial de Galicia. En la actualidad, están en proceso de creación dos áreas metropolitanas -una en el norte (A Coruña-Ferrol) y otra en el sur (Vigo-Pontevedra). Galicia ya ha dado los primeros pasos hacia el asociacionismo, pero aún queda un largo camino por recorrer. Por ahora, un tercio de los ayuntamientos gallegos sobreviven en solitario. De la mano de la agrupación municipal, han ido cogiendo fuerza las mancomunidades -ya suman un total de 43 que reúnen 217 concellos- y los consorcios de servicios -con un total de 22 que agrupan a 128 municipios-.

¿Cuál es la organización territorial más adecuada para Galicia? PP, PSdeG y BNG ponen sobre la mesa sus propuestas y manifiestan su disposición a dialogar para lograr que todos los municipios, con independencia de su situación financiera y del número de habitantes, puedan racionalizar los gastos y mejorar la calidad de los servicios

. PP. Por las áreas metropolitanas y la integración de los municipios con menos población

En los años setenta, Alemania, Inglaterra, Dinamarca o Bélgica acometieron el proceso de fusión municipal. En los países del sur de Europa, ni España, Francia, Portugal, Italia o Grecia dieron el paso. El PP reconoce las "disfunciones" actuales de los municipios, tanto en las áreas urbanas, como en el rural.

Aunque los populares aluden a la "identidad territorial propia" que tiene Galicia y que, por tanto, "no debe copiar de nadie", su portavoz en la materia, Román Rodríguez González, apunta a la integración selectiva de municipios aplicada en Francia como modelo a tener en cuenta. "Se fusionan los servicios, pero no las estructuras políticas territoriales", argumenta. Para el PP, las áreas urbanas, "cada vez más se entienden en una visión metropolitana". En el caso del rural, Rodríguez advierte del fenómeno del inframunicipalismo. "La despoblación -argumenta- se está llevando muchos municipios, con gran riesgo de pérdida de su propia razón de ser". Pero los populares no se aventuran a hablar de fusión y optan por la opción de la integración selectiva de municipios. "Hay que integrar los servicios públicos y generar la conciencia de que sin perder la identidad de cada municipio debe haber una prestación conjunta de los servicios", concluye.

. PSdeG. Concellos que no sólo sean gestores, sino también actores políticos

Para el PSdeG, el debate sobre la reorganización del modelo territorial no debe centrarse en la fusión de los concellos. "Se parte de una base falsa. El hecho de sumar cinco municipios insolventes no da como resultado uno más solvente, sino una unidad más amplia pero con más dificultades", argumenta la portavoz de los socialistas gallegos, Mar Barcón. Por este motivo, el PSdeG propone modelos intermedios de gobierno local, con la delimitación de áreas urbanas y áreas metropolitanas y el desarrollo de los consorcios y las mancomunidades. En cuanto al papel de los ayuntamientos, Barcón defiende que los entes municipales dejen de ser "simples gestores" de las partidas asignadas desde la propia comunidad o el Estado y pasen a ser "actores con capacidad de iniciativa política".

. BNG: La apuesta por tres entes administrativos: "concellos, comarcas y país"

El BNG ya tiene redactada su propuesta sobre el modelo administrativo de Galicia. En ella, en contra de lo defendido por el PP, las diputaciones no tienen cabida. Para el Bloque, las competencias de las diputaciones deberían ser asumidas por las comarcas, los municipios y la Xunta. Los nacionalistas limitan los entes administrativos a "concellos, comarcas y país", con la dinamización de las áreas metropolitanas en las grandes ciudades y las comarcas en el rural. El portavoz de Administracións Públicas e Institucionais del BNG, Alfredo Suárez Canal, coincide con populares y socialistas en la necesidad de impulsar las mancomunidades y los consorcios.

Sobre la fusión de los concellos, el BNG asegura que "no es un fin en sí mismo, sino un instrumento para resolver problemas en la gestión de servicios". En cuanto a la comarcalización, Suárez Canal apunta que es el gran asunto pendiente. "En Galicia están la mitad de los núcleos de población del Estado. Eso requiere un tratamiento singularizado", concluye el portavoz nacionalista.