Hasta hace unos años las palabras se las llevaba el viento, pero internet permite que siempre puedan encontrarse en algún lugar, incluso si se trata de un gazapo que se ha negado vehementemente en el Parlamento. El conselleiro de Cultura, Roberto Varela, aplicó la contumacia como medida de defensa y negó haber castellanizado los nombres de Sobrado dos Monxes y Touro durante una conferencia en Fitur. Ahora, un vídeo permite escucharlo perfectamente referirse a ellos como "Desván de los Monjes" y "Toro" sin pestañear.

Hace 15 días, el máximo representante de la cultura gallega espetó en el Parlamento: "Hay que ser estúpido para pensar que voy a decir Desván de los Monjes". Un vídeo colgado en Youtube no solo les da la razón a las voces que denunciaron esta situación, sino que vuelve estas declaraciones en contra del propio Varela, que pidió a la oposición que dejase "de buscar basura en internet".

La vehemencia dejó paso ayer a las disculpas, después de que internet le refrescase la memoria. Varela suscribió una declaración en la que reconoce el error y pide disculpas. La frase, que puede encontrarse en la red, no deja muchas otras opciones al máximo representante de la cultura gallega. "Las tierras de Arzúa, Boimorto, Boqueixón, Melide, O Pino, Santiso, Desván de los Monjes, Toques, Toro, Vedra y Vilasantar conforman la mancomunidad de las tierras de Ulla y Tambre", enumera.

Este "descuido idiomático" se debe al uso de un programa de traducción aplicado a su discurso en Fitur sobre un texto escrito inicialmente en gallego.

Varela trazó una justificación, además, para su respuesta a la oposición. Su vehemencia se debe a que, "conscientemente", nunca hubiera utilizado esos topónimos. La culpa, por tanto, es del traductor. Y de que las explicaciones apareciesen tras la publicación del vídeo, del subconsciente. Para el Bloque, sin embargo, su "deturpación" de la toponimia no admite excusas.

Y es que el cargo al frente de Cultura turba e induce a errores. Aunque a Varela le falta para superar a uno de sus antecesores. Xesús Pérez Varela bautizó a Sidney O'Connor como Ocono y más tarde alabó a Carmiña Burana como "una de las buenas cantantes de este país". Ha habido traspiés mayores, como el de la hoy presidenta de Madrid, Esperanza Aguirre, que ante los micrófonos alabó a la gran escritora Sara Mago, en lugar de al portugués José Saramago.

Hasta ahora las polémicas por la castellanización de los topónimos afectaba a los organismos estatales como la DGT o el propio Instituto Cervantes, que habla de Mellid, El Cebrero, Finisterre o Palas de Rey.

El conselleiro, cuya gestión del Xacobeo está siendo muy discutida, abre otro frente con unas palabras que añaden más gasolina a la hoguera en torno al uso del gallego por parte de la Xunta de Feijóo. Tras las manifestaciones contra el decreto de educación y la aprobación de una moción para que los cargos públicos usasen el gallego, el gazapo reaviva la polémica. Eso sí, queda por analizar todavía si la enumeración de Varela respeta el decreto de su Gobierno. Al menos, un tercio de los topónimos están pronunciados correctamente.