Un artefacto explosivo estalló durante la madrugada de ayer en la sede del PSdeG de la localidad pontevedresa de A Estrada ocasionando importantes daños materiales, tanto en las oficinas del partido como en los locales vecinos y los automóviles estacionados en la calle. Aunque ningún grupo reivindicó la autoría de este atentado, todas las líneas de investigación apuntan a que alguna organización independentista radical puede estar detrás del ataque.
El principal argumento de las fuentes policiales consultadas por este periódico para sospechar de grupos independentistas es el modus operandi escogido para el atentado: un artefacto de factura casera y una detonación sin aviso previo. Ataques similares se han registrado en la comunidad autónoma en los últimos años contra obras del AVE o bien contra intereses inmobiliarios y fueron relacionados con el grupo radical Resistencia Galega.
El artefacto, compuesto por un kilogramo de pólvora alojado en un recipiente de pequeño tamaño y dotado, presumiblemente, de un temporizador, fue colocado en una ventana exterior de la sede socialista, localizada en la planta baja de un edificio de cuatro alturas situado en una céntrica calle de A Estrada. La detonación se produjo pasadas las 02.15 horas. Una patrulla de la Policía Local circulaba por las inmediaciones cuando se escuchó la explosión, de manera que pudo personarse con rapidez en la zona. Aunque todavía no surgieron voces que afirmen haber visto a quien colocó el artefacto, a primera hora de ayer un ciudadano comunicó haber advertido la presencia de una bote metálico en el alféizar de la ventana antes de la detonación, sin que nada le hiciese sospechar qué contenía y lo ocurriría poco tiempo después.
La explosión ocasionó cuantiosos daños en el interior de la sede de esta formación política y tuvo repercusiones en al menos tres establecimientos comerciales de la calle. La onda expansiva alcanzó también a diversos vehículos estacionados en la vía pública y provocó la caída del ventanal del primer piso del inmueble, motivando asimismo la aparición de grietas en este mismo nivel. Los dos despachos que dan a la fachada principal en la sede socialista resultaron muy dañados, especialmente el situado en el piso inferior. La explosión arrancó un palmo de granito macizo, aniquiló la estructura de los ventanales, quedando algunos aluminios literalmente clavados en la pared. A todo este escenario de destrucción se suman los muebles y equipos informáticos destrozados.
El estruendo fue tan fuerte que arrancó a muchos de los vecinos de la cama. "Se escuchó un boom muy seco. Hizo temblar la casa", comentaba una de las afectadas.
El alcalde de A Estrada, José Antonio Dono, que se personó en el lugar tan pronto como conoció la noticia y pasó varias horas observando cómo un grupo especializado de la Guardia Civil recogía las pruebas necesarias para ayudar en el esclarecimiento de los hechos, acudió ayer al acuartelamiento de la Benemérita para declarar, en calidad de responsable de la sede local del partido. "Yo no tengo ni la más remota idea de quién es el autor, lo que si creo es que no es ningún conflicto local, porque no lo hay", declaró el regidor, que consideró que el atentado es "algo que viene de fuera y que no tiene nada que ver con nuestro ayuntamiento", añadió.
El secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, se personó en la sede socialista de A Estrada para comprobar los daños ocasionados a las instalaciones. Además este partido recibió el apoyo de todas las fuerzas políticas, del presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo que mostró su repulsa por este atentado, al igual que la presidenta del Parlamento, Pilar Rojo.
