Los candidatos socialistas a las municipales de mayo buscan nombres con proyección paras sus listas electorales. Pero la máxima de su líder, Manuel Vázquez, de "un hombre, un cargo" cierra las candidaturas a los dirigentes que ocupan otro puesto en el grupo socialista. Con el objetivo de mantener las actuales alcaldías y hacerse con más bastones de mando, alcaldes del PSdeG y cargos orgánicos ya han planteado a Vázquez que reconsidere su compromiso sobre la acumulación de cargos. De esta forma podrían incluir a candidatos con tirón en sus listas y reforzar su poder municipal. El planteamiento que ha sido comunicado en las últimas semanas por regidores socialistas a su secretario xeral, también será trasladado este mes de noviembre al comité nacional del PSdeG con la intención de sondear las posibilidades que caben de cara a los comicios locales del próximo año.

"Como regla general, (la máxima de un hombre, un cargo) está bien, pero también habrá que ver las excepciones", comentan fuentes socialistas, que al mismo tiempo manifiestan su descontento con que este principio se aplique a los diputados socialistas en Galicia y, por el contrario, queden excluidos los que ocupan un escaño en Madrid.

Este veto a la acumulación de cargos fue implantado por Vázquez en el congreso en el que sucedió a Emilio Pérez Touriño al frente del PSdeG tras la derrota en las elecciones municipales del 1-M. "Porque tenemos banquillo, gente que quiere salir a jugar", justificaba entonces el nuevo líder de los socialistas gallegos. A partir de ahí, los diputados autonómicos que conjugaban su cargo con una concejalía tuvieron que elegir: Concello o Parlamento. Y la elección no se presentó complicada. Los parlamentarios que compatibilizaban su acta con puestos en los ayuntamientos optaron por mantener su escaño en O Hórreo. "Es una tónica que no tiene vuelta atrás y mientras yo sea secretario xeral, se va a cumplir a rajatabla", sentenciaba el líder del PSdeG, para advertir a continuación a todos los parlamentarios de que "tendrán que renunciar" a su escaño en el Pazo do Hórreo si desean concurrir en las listas municipales. "No va a volver a haber acumulación de cargos", zanjó.

Año y medio después de la aprobación de esta máxima en el congreso extraordinario que nombró a Vázquez como nuevo secretario xeral del PSdeG, los candidatos socialistas a las próximas municipales le emplazan a a priorizar la elaboración de las candidaturas permitiéndoles incluir a gente de peso en el partido sin obligarles a renunciar a su acta como diputado pese a concurrir a los comicios locales.

Renovación

Haya o no excepcionalidades para la acumulación de cargos en el PSdeG, Vázquez ya tiene sobre la mesa la inminente remodelación del grupo parlamentario. Lo hará aprovechando la configuración de las listas electorales para las próximas municipales. Esta ansiada remodelación, reclamada en especial por la ejecutiva provincial de A Coruña, se producirá en enero, coincidiendo con la presentación de las candidaturas a las elecciones locales, o en mayo, una vez que los candidatos tomen posesión de su cargo. En un principio, según fuentes socialistas, estos cambios afectarían al manos a seis miembros de la dirección del PSdeG.

Uno de los hombres fuertes que podría abandonar el grupo parlamentario y que fue desvelado hace una semana por el propio Vázquez es el de su portavoz, Xaquín Fernández Leiceaga, que podría concurrir como número dos del PSdeG por Santiago. "Es una decisión personal, pero ayudaremos a Leiceaga a tomar la mejor decisión para él y para el partido", se limitaba a decir Vázquez en una entrevista a la Cadena SER. En los próximos meses, el líder del PSdeG deberá decidir las nuevas caras que incorporará a la dirección socialista, bien en sustitución de los dirigentes que dejan su acta para ocupar un cargo municipal -en el caso de que no haya excepciones en cuanto al veto a la acumulación de cargos en el PSOE gallego-, bien por la decisión de Vázquez de dar un nuevo rumbo político para el grupo parlamentario. Esto supondría que Vázquez tomaría las riendas del grupo parlamentario y asumiría un mayor protagonismo político de cara a la carrera hacia San Caetano.