A la más que probable congelación del número de juzgados y magistrados existentes en la comunidad, la Justicia gallega acaba de sumar una nueva preocupación. Desde esta semana el personal de gestión, tramitación y auxilio judicial que actuaba como refuerzo en toda Galicia se ha reducido considerablemente tras la decisión de la Xunta de no renovar una treintena de contratos que finalizaban el 30 de septiembre. La medida ha sido recibida con gran preocupación entre los trabajadores, sobre todo los de A Coruña, donde ayer mismo la junta de personal del sector Justicia se reunió para hablar de una merma de los refuerzos que afecta particularmente a esta provincia.

Desde la CIG estiman que en los juzgados coruñeses cesaron el lunes 19 interinos, 11 solo en la capital. Pero aunque el sindicato vincula la decisión con "los recortes presupuestarios" y critica que no se hayan tenido en cuenta las necesidades de los órganos en los que se prescinde del refuerzo, la Xunta subraya que es un procedimiento "habitual" y que todos los años hay contratos que vencen y no se renuevan.

La decisión de la Consellería de Presidencia, Administracións Públicas e Xustiza supone un severo recorte a las medidas de refuerzo que operaban hasta ahora en la comunidad, ya que de 100 interinos dedicados a labores de apoyo tan solo quedan 70. Sin embargo, desde el departamento de Alfonso Rueda enmarcan dentro de la normalidad la medida, ya que, dicen, los interinos de apoyo tienen contratos "por un tiempo determinado" y aunque son prorrogables, no siempre es así.

Xustiza apela a la propia función de refuerzo para justificar por qué ha decidido prescindir en bloque de 30 interinos, que se ocupan de labores administrativas y de gestión dentro del juzgado para agilizar el trabajo que depende de secretarios y jueces. "La Xunta pone refuerzos en un juzgado ante situaciones puntuales y excepcionales de carga de trabajo. Y cuando se normaliza la actividad, cesan", explican desde la Consellería de Presidencia, que añade que aunque la Xunta "no está obligada a poner refuerzos" que ayuden a la plantilla oficial, lleva años haciendo ese "sobresfuerzo económico".

De hecho, la situación de todos los órganos con medidas de apoyo se revisa cada mes o trimestralmente, dependiendo de las características del juzgado, para comprobar cómo evoluciona el trabajo y si la actividad "se normaliza". En función de ese análisis, explica Presidencia, se decide si se prescinde del refuerzo al vencimiento o se prorroga.

Pero desde la CIG aseguran que es "falso" que se hayan eliminado interinos donde la carga de trabajo está normalizada, ya que la crisis "agravó" el colapso de los juzgados y la escasez de plantilla que arrastran desde hace años ha convertido necesidades "coyunturales en permanentes". Por ello, los sindicatos reunidos ayer en A Coruña decidieron pedir a la Xunta que convoque a la mesa sectorial de Justicia para abordar los últimos "recortes de personal" y aclarar que va a pasar con el resto de refuerzos.

El futuro de los funcionarios de refuerzo ya fue motivo de polémica en el verano de 2009, cuando la Xunta informó a los sindicatos de que no renovaría ninguno de los 54 contratos eventuales que expiraban el 31 de agosto. Ante las protestas concedió una prórroga de un mes y garantizó los contratos para el resto hasta final de año. En esta ocasión, sin embargo, Xustiza asegura que en octubre los otros 70 interinos judiciales seguirán en sus puestos pero no concreta hasta cuándo.