El alcalde de Pontevedra, el nacionalista Miguel Anxo Fernández Lores, firmó ayer un decreto por el que se toman varias medidas, como limitar el riego en jardines o el baldeo de agua en las calles, para reducir el consumo de agua después de que la falta de lluvias haya llevado a que en los últimos tres días el nivel del río Lérez que cruza la ciudad haya bajado un metro.

Además de pedir a Sanxenxo que se abastezca de la traída de O Salnés, el concello también emplaza a la papelera ENCE que siga su ejemplo y reduzca el uso de agua para su actividad industrial. La edil de Servicios, Carme da Silva, afirma que ENCE consume más agua de la que gasta porque, tras captar agua, la suelta en un aliviadero sin llegar a utilizarla. El concello espera que el ente público Aguas de Galicia transmita el requerimiento a la empresa, que según el municipio consume al año "entre 9 y 14 millones de metros cúbicos".