Dos obras capitales para la provincia de Pontevedra miran de reojo la fecha del 20-N, día en que se celebrarán las elecciones generales. Son la ampliación de la AP-9 en el puente de Rande y el desdoblamiento de la vía rápida de O Morrazo para convertirse en autovía. Su ejecución permitirá aliviar el tráfico en una de las zonas más congestionadas de Galicia donde los colapsos de producen con frecuencia. La fecha de las elecciones, como signo político de referencia, está marcada en rojo por la Xunta y, sobre todo por Fomento, para demostrar su compromiso con las dos obras y también para sacar réditos ante las urnas o, cuando menos, evitar que sean utilizadas por los respectivos partidos como arma electoral bajo la acusación de incumplimiento de la palabra dada.

Fomento, tras acumular ya siete meses de retrasos, anunció que ahora sí, que antes del 20-N sacará a licitación la ampliación del puente de Rande. Y la Xunta esperar concluir este mes los trabajos de la mesa técnica que valora la única oferta que se presentó para desdoblar la vía rápida de O Morrazo para, acto seguido, proceder a su adjudicación. El compromiso de la Consellería de Medio Ambiente era contratar las obras este año, y va bastante justa de tiempo, por lo que lo más probable es que los trabajos no empiecen hasta el año próximo. Pero al menos quiere dejarla adjudicada en este ejercicio.

Los dos proyectos son fundamentales para Pontevedra, tanto por el servicio que prestarán a las comunicaciones, al desatascar la conexión entre Vigo y la zona norte de la ría, como por la inversión requerida. El presupuesto previsto de ambas asciende a 530 millones de euros. Una cantidad muy elevada en tiempos donde las arcas públicas son exiguas. Y aún así, las dos administraciones renuevan sus compromiso con ambas obras. Por lo menos hasta el 20 de noviembre.

Si bien la ampliación de Rande es el proyecto más complicado técnicamente, el más costoso es la autovía de O Morrazo. El presupuesto de licitación asciende a 364 millones de euros. Las obras se licitaron en marzo y el plazo para presentar ofertas concluyó el 4 de julio. Solo hubo una. La presentada por Isolux-Corviam. Ninguna más, a pesar de tratarse de un proyecto de envergadura en una época donde no abunda el trabajo.