La Xunta ha confirmado que los embalses --de la demarcación Galicia-Costa-- han recuperado sus niveles "normales" --se encuentran al 72,44%-- para esta época del año, tras las precipitaciones caídas desde finales de octubre, y ha indicado que las medidas de regulación de embalses y de contención del consumo fueron "eficaces" para evitar entrar en una situación de alerta.

Así lo ha indicado el presidente de Augas de Galicia, Francisco Menéndez, en una rueda de prensa en la que ha recordado que la pasada primavera ha sido la más seca y cálida desde que se tienen registros, en 1961, y que la tendencia de pocas precipitaciones ha continuado en verano y hasta bien entrado el otoño, pues las lluvias no comenzaron hasta el 22 de octubre --el peor mes--, ha dicho.

Actualmente, algunos embalses, como el de Baiona, están al 100 por 100, aunque otros mantienen registros inferiores debido, ha explicado, a que algunos de ellos se regulan para que puedan recoger aguas en caso de lluvias abundantes. Es el caso de Caldas, que estaba entre el 17 y el 23 de octubre al 48,75% y se encuentra ahora al 44,29%. El conjunto, los embalses de abastecimiento han pasado del 48,51% al 72,44% a día 12 de diciembre.

Esta situación "excepcional", ha indicado Menéndez, ha llevado al organismo a hacer "una reflexión" acerca de la situación en los embalses que abastecen a las dos zonas de mayor población (Vigo y A Coruña) y a estudiar la necesidad de implantar medidas que mejoren la garantía de suministro en el futuro.

La garantía de suministro en Galicia es de seis meses, frente a los 16 de los sistemas de Madrid, un periodo que en la Comunidad gallega "no es necesario", de acuerdo con las estadísticas, ha explicado Menéndez, ha dicho que, no obstante, la situación de este año ha llevado a hacer "estudios específicos para actuaciones de sequía a medio plazo en estos dos sistemas".

El responsable de Augas de Galicia ha apuntado que el embalse de Cecebre, que abastece a A Coruña, no tuvo una alerta "excesivamente grave" este año y amortiguó "bastante bien" la falta de lluvias. No obstante, si no se hubiesen tomado medidas, la situación habría sido "realmente preocupante". En el caso de Vigo, las reservas entraron en "mínimos históricos", aunque nunca por debajo del 40%.

Menéndez ha apuntado, como una de las conclusiones, que la escasez de lluvia ha afectado más a los sistemas del sur de Galicia que a los del norte y el caso más preocupante ha sido el de Bahíña, en Baiona, que ha precisado recibir abastecimiento de Zamáns, al bajar hasta el 9,94% y entrar en "valores insostenibles". Además, ha apuntado que, dado que los registros muestran valores bajos de forma recurrente, Baiona tendrá que conectarse "cada cuatro o cinco años" a Zamáns.

Además, ha indicado que el Gobierno gallego está redactando el plan especial de sequía, cuya aprobación está comprometida para 2012. En el mismo se incluirán, además de las alertas para los sistemas de embalses, también para los fluyentes, como el de Pontevedra.

Balance

Menéndez ha explicado que en Galicia-Costa no hay grandes acuíferos que mantengan el caudal de los ríos en verano, por lo que son "muy sensibles" a la ausencia de precipitaciones pero también se recuperan "con rapidez".

Este año, ha indicado, el descenso de niveles en los embalses comenzó a notarse en mayo, cuando habitualmente empieza a finales de julio; y se prolongó hasta finales de octubre, mientras que normalmente empieza a recuperarse a principios de ese mismo mes.

La Xunta, ha expuesto, envió comunicación en mayo a los ayuntamientos por el descenso del agua acumulada y preguntó también si estaban registrando incidencias por la sequía, a lo que 26 contestaron que tenían problemas puntuales, especialmente en traídas particulares, y ocho que no.

Aguas subterráneas

El presidente de Aguas de Galicia ha indicado también que este año han comenzado la evaluación del estado de las aguas subterráneas de pozos, aunque aún no hay datos para establecer comparaciones.

Las conclusiones del estudio son que el nivel más bajo se registró también en octubre y que la recuperación fue "rápida", subiendo un metro en un mes.