No solo la Xunta sospecha que detrás del incendio del parque natural de las Fragas hay una mano negra. En contra de la investigación del Seprona, que concluye que las llamas que hace dos meses asolaron más de 800 hectáreas del último bosque atlántico de Europa no fueron provocadas, la Plataforma en Defensa de las Fragas avala la teoría de la intencionalidad. Y por ello estudia personarse en la causa para evitar su archivo; una decisión que según fuentes judiciales tomará el juez el instructor ya que el informe del equipo de investigación está "muy armado y fundamentado". A la vista de las pesquisas de la Guardia Civil, la Fiscalía descarta recurrir el sobreseimiento que prepara el juzgado. "Un recurso no se puede fundamentar en la intuición ni el imaginario popular", advierten desde el Ministerio fiscal, ya que -concluyen- ante una investigación en la que no se constata evidencia alguna de intencionalidad "no hay base legal" para presentar un recurso.

A la espera de conocer de manera oficial las conclusiones de la investigación, adelantadas la semana pasada por este diario, la Xunta todavía no ha decidido si se presentará o no como acusación en la causa. "Hasta que se tenga conocimiento formal del informe, no se tomará una decisión", apuntaron ayer desde la Consellería do Medio Rural.

Colilla mal apagada

La Plataforma en Defensa de las Fragas do Eume sospecha que el fuego no se originó en un único punto -en contra del informe remitido por la Guardia Civil al juez instructor- sino que tuvo al menos tres focos simultáneos, como sostuvo en un primer momento la Xunta. Para tratar de contrastar las conclusiones del Seprona -que apuntan a un episodio accidental, al parecer una colilla mal apagada, como causante del incendio-, el colectivo se plantea solicitar nuevos peritajes.

"Sería la primera vez que una acusación popular, entre comillas, obliga, a la Fiscalía a hacer las investigaciones", aseguran desde la plataforma.

"Otro incendio más provocado por una colilla... Deben de andar todos los guardia del país tirando colillas", ironizó Miguel Anxo Abraira, uno de los impulsores de la plataforma, en alusión a las conclusiones del Seprona. "Sorprende que todos los incendios de este país -cuestiona- sean de personas que se delatan (por escapes de quemas) o fortuitos. Habrá que buscar la intencionalidad", sentenció. Y por ello, la Plataforma en defensa de las Fragas do Eume advierte de que una de las motivaciones de los incendios es la económica. "¿A quién benefician estos continuos incendios? Llama la atención también que haya una asociación de papel dispuesta a pedir unos permisos a vecinos y sulfatar con pesticida prohibido eucaliptos que no son suyos... algo que es carísimo. Parece ser que hay gente muy interesada en que los eucaliptos salgan adelante", concluyen desde la plataforma.

Pero la Fiscalía no tiene la más mínima duda sobre el informe del Seprona: "La investigación ha sido hecha por funcionarios imparciales e independientes. No podemos cuestionar las conclusiones de un informe riguroso y bien armado".

El juez instructor de la causa, el titular del juzgado de instrucción número 3 de Ferrol Alejandro Morán Llordén, está a la espera de que la Guardia Civil complete el informe sobre el incendio con algunas diligencias -se trata de pruebas complementarias que avalan la tesis de que el fuego no fue intencionado-. Con estas conclusiones sobre la mesa, al juzgado le tocará dictar el sobreseimiento provisional. "Sin autor y sin dolo, solo cabe el archivo", apuntan fuentes de la investigación.

El informe del Seprona concluye que el incendio se originó en el monte do Crego, en el municipio de A Capela, en un punto situado junto a un sendero de cicloturistas en una zona elevada de difícil acceso con vehículos. "Es un valle de braña seca, con suelo de turbas, un material que cuando hay falta de humedad es un potente combustible", apuntan fuentes de la investigación.

La hora de inicio del fuego que redujo a cenizas el corazón de las Fragas ha resultado imposible de determinar en la investigación, debido a las características del terreno y las condiciones meteorológicas. Lo que sí está claro es que a las 11.48 horas se produjo una llamada al 112 alertando de la presencia de un incendio en esa zona. No obstante, ese aviso se "minimizó", según fuentes próximas a la investigación, lo que llevó a la Xunta a dar las 15.16 como hora de inicio del incendio en el parque eumés.

El Seprona concluye en su informe la "excepcionalidad" de las condiciones meteorológicas de ese día. "El factor de humedad -mantienen- fue determinante en el desarrollo del incendio".