El Consello de la Xunta aprobó ayer la constitución y los estatutos de la Axencia Tributaria de Galicia, un órgano con el que pretende reducir un 20% los gastos del actual modelo de gestión fiscal. El ente autonómico entrará en funcionamiento el 1 de enero y su objetivo fundamental es, según el Ejecutivo, "evitar subir los impuestos a los ciudadanos".

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, afirmó que este nuevo modelo de gestión de los impuestos permitirá "aglutinar" en un solo órgano todas las funciones tributarias: liquidación, gestión, inspección y recaudación. Asimismo, "reducirá al mínimo" la burocracia y aumentará la "efectividad" en la prevención del fraude fiscal sin eliminar servicios. El 20% de ahorro que se pretende alcanzar supone unos 3,75 millones de euros al año, es decir, 15 millones durante toda la legislatura.