La máxima del BNG en la carrera hacia el 21-O pasa por movilizar a los sectores más descontentos con la política de recortes del Gobierno de Rajoy y con los tres años y medio largos de Alberto Núñez Feijóo en la Xunta. Y para añadir combustible a esa estrategia, su candidato, Francisco Jorquera, agitó ayer el recuerdo de la catástrofe del Prestige, producida cuando Rajoy era vicepresidente del Ejecutivo de José María Aznar, y reclamó una rebelión social contra la "marea negra de la injusticia, de las políticas que conducen al empobrecimiento de la mayoría social, de la perversión de la democracia y centralismo" que atribuyó al PP.

"Será contestada por una inmensa marea social que, de la mano del BNG, va a apostar por una Galicia más libre y más justa, por fortalecer el autogobierno y por una salida social a la crisis", profetizó antes de criticar unos recortes "que solo conducen a más recortes". Jorquera cerró así el acto de presentación de las candidaturas del BNG por la provincia de Pontevedra, que tendrá como cabeza de cartel a Carlos Aymerich, natural de Vigo pero afincado en A Coruña.

En la misma línea se posicionó el cabeza de cartel por la provincia Carlos Aymerich, que cambia por primera vez la provincia por la se presenta para transmitir pluralismo en las listas nacionalistas tras la asamblea nacionalista de enero.

El exportavoz parlamentario del Bloque denunció el déficit democrático respecto a los recortes y reclamó un "referéndum" sobre un posible "nuevo rescate" de la economía española y sobre el "memorándum" de la inyección de fondos públicos en el sistema bancario. "Los comicios serán un referéndum sobre qué políticas quiere la gente", aseguró.