-Actos de precampaña, la Consellería, sus dos hijos, el gimnasio... Y aún le queda tiempo para ir de vinos por A Coruña. Viéndola parece fácil conciliar vida laboral y familiar y ocio.

-No me considero el ejemplo de mujer que sea capaz de conciliar vida familiar y laboral. De hecho, estoy bastante pivotada hacia el lado del trabajo. Son las circunstancias que me han tocado vivir; son momentos muy difíciles y tengo que dar el 120% a las responsabilidades que me ha confiado Feijóo. Más ahora, que además de confiarme la responsabilidad de la Consellería ha confiado en mí para estar al frente de una candidatura.

-Del octavo puesto de la lista en 2009 ha pasado a número uno, ¿cuánto ha influido su amistad con Negreira para que Feijóo a designase cabeza de lista?

-Carlos Negreira, me consta, cree en mí. Por parte del presidente regional, no me cabe duda de que si él no confiara en mí, hubiera dicho lo que hubiera dicho el presidente provincial, no estaría aquí.

-Negreira la presentó este fin de semana "como unha nena de Monte Alto", pero usted presume de ser de Barakaldo...

-Soy hija de emigrantes. Mi forma de ser es una mezcla de lo que aprendí en el País Vasco y de mis orígenes y mi sangre gallega. Yo me siento del barrio de Monte Alto. En la calle San Juan cuando apenas había tráfico jugaba al fútbol. Me llamaban Pirucho porque era la única niña que jugaba con 13 niños, uno de ellos mi marido. Con respeto a los demás barrios, para mí el de Monte Alto es el mejor.

-La oposición critica que la cabeza de lista sea la conselleira del desempleo...

-El desempleo no ha nacido hace dos años ni ocho meses. Parece mentira oír esto de una de las personas que tuvo responsabilidad en un Gobierno socialista al que responsabilizo de no haber tomado muchas medidas para que España no esté como está ahora. La Xunta ha tenido que luchar contra la negación, la inacción y la acción equivocada del PSOE para hacer que Galicia sea una de las comunidades más solventes. Además tuvimos que trabajar para que Galicia sea una comunidad fiable, para que tengamos la posibilidad de colocar nuestra deuda y no tengamos que acudir al Fondo de Liquidez.

-¿Ve A Coruña como una provincia fácil para el PP el 21-O?

-Fácil, nunca. Y además en este momento se añade una característica que va más allá de uno, dos o 26 partidos: la crisis. A Coruña sigue siendo el motor de los votos del PP y, además, ha sido el inicio del cambio. No me cabe duda de que es responsable de la victoria del PP en Galicia. Explicaremos a la ciudadanía nuestro programa y nuestro hacer durante estos años para lograr un escaño más, 13. Solo caben dos posibilidades, el PP, para continuar con esta senda hacia el crecimiento o el desgobierno de un bi, tri o cuatripartitos que no han funcionado en ningún sitio.

-¿Los recortes del Gobierno de Rajoy, la subida de impuestos y asuntos como las preferentes, pasarán factura a Feijóo el 21-O?

-La Liga que ahora estamos jugando es la regional. Lo que pedimos a los ciudadanos es que juzguen al PP gallego y a los 25 partidos restantes que se presentan. Aquí debemos pagar por nuestras acciones no por las acciones que pueda hacer el Gobierno central. Pero es verdad que lo que le ocurra a España nos repercute. La labor que ha podido faltar en determinados momentos por parte del Gobierno central ha sido la de la explicación.

-¿Errores de comunicación?

-Estoy convencida de que hubo errores de comunicación. No se explicó bien. Se debería haber trasladado a la ciudadanía, no que es la mejor solución sino la única; y decirle que España tiene que adoptar estas reformas porque pese a que ahora lo vamos a pasar mal, estaremos muy bien en unos años.

-¿Qué promete el PP gallego, o ya no hacen promesas para evitar incumplirlas?

-Hay dos maneras de gobernar. En campaña es una tentación fácil decirle a la gente lo que quiere oír, para mí sería facilísimo decir que para la próxima legislatura vamos a tener un crecimiento absolutamente disparado y va a estar todo el mundo colocado y vamos a bajar todos los impuestos. Se puede crecer, pero hay que ir al ritmo de lo que nos va a marcar no solo nuestra economía sino la nacional también. Galicia está preparada para salir de la crisis ya. Ese es el camino que queremos emprender el PP, teniendo en cuenta que no va a ser fácil ni un camino rápido. Estamos convencidos de que en esta situación, aunque las circunstancias no varíen que van a variar a nivel del Estado porque las reformas que ha hecho el Gobierno central se van a empezar notar, Galicia iba a empezar la senda del crecimiento de la economía y del empleo. Pero no prometiendo como si esto fuera un Maná que es lo que hacen algunos.

-¿La operación Pokemon ha puesto fin a la campaña?

-La ensucia. No es una buena noticia, sobre todo cuando afecta directamente a la honorabilidad y la fiabilidad de una profesión que está muy denostada. Pero la ciudadanía tiene que ver que aunque haya una manzana podrida en el cesto, no todas lo están. Esa manzana se quita. Este partido lo tiene clarísimo. Y ha actuado siempre. Dentro del partido hemos sido siempre muy firmes. Las personas que se han visto involucradas han desaparecido, han dado ese paso atrás.

-No en todos los casos, recuerde la operación Orquesta en A Costa da Morte.

-Es curioso que de este caso todavía no haya nada. A mí eso me llama la atención.

-Había alcaldes imputados, como en el caso Pokemon.

-Por unas fiestas, si no recuerdo mal.

-Sí, ¿y?

-Lo veo distinto. El alcance, el momento y las causas no son las mismas. Porque detrás de esta operación que estamos viviendo ahora, vaya por delante la presunción de inocencia, de lo que se está hablando es de regalos particulares, enriquecimiento personal. Eso me parece más grave. Cuando pasó lo de los diputados, (la reacción del PP) fue cuestión de 24 horas.